El Gobierno ha puesto en marcha la segunda fase del protocolo de intervención sociofamiliar, con el objetivo de brindar atención integral a las familias afectadas por la tragedia ocurrida tras el desplome del techo de la discoteca Jet Set.
La comisión encargada, integrada por el programa Supérate, el Ministerio de Salud Pública, el Gabinete de la Niñez y Adolescencia (GANA), el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) y el Sistema Único de Beneficiarios (Siuben), ha contactado hasta la fecha a familiares de 200 de los casos correspondientes a las personas fallecidas.
Actualmente, 169 familias están recibiendo atención; de estas, 125 requieren apoyo económico y acompañamiento psicológico. Además, se han identificado 122 niños, niñas y adolescentes en condición de orfandad, de los cuales un alto porcentaje perdió tanto al padre como a la madre durante el suceso ocurrido la madrugada del pasado 8 de abril.
También se han identificado hogares compuestos por adultos mayores y menores de edad con alguna condición de discapacidad, quienes dependían de familiares fallecidos en la tragedia dej Jet Set tanto para su cuidado como para su sustento económico.
Como parte de los avances de esta fase, se ha iniciado un programa de atención emocional a cargo de 25 psicólogos del Ministerio de Salud Pública y del Servicio Nacional de Salud (SNS). Paralelamente, Conani —como órgano rector del Sistema de Protección—, junto al Gabinete de Niñez y Adolescencia (GANA), trabaja en la aplicación de medidas de protección adaptadas a cada caso.
La subdirectora de Proyectos Sociales y Asuntos Comunitarios de Supérate, Damelia Zapata, informó que ya se han registrado 37 hogares, “los cuales, según lo estipulado en el reglamento, recibirán un subsidio especial de 30 mil pesos por un período de seis meses”.