Con el compromiso de elaborar una Carta Medioambiental Iberoamericana para encaminarse a la solución de los problemas que afectan a los países, concluyó ayer la XI Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de Medioambiente que contó con la presencia del presidente Luis Abinader.
Dicho documento deberá estar listo para ser presentado durante la próxima Cumbre Iberoamericana de Jefas y Jefes de Estado y para ello, se ha estableció en la reunión un grupo de trabajo, coordinado por República Dominicana con el apoyo de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), que trabajará para definir el contenido, alcance y objetivos de la misma.
El borrón de la propuesta, que deberá ser consensada por los ministerios iberoamericanos de Medio Ambiente y Cambio Climático, debe estar preparado a más tardar, el mes de febrero del 2023 y dentro de su contenido debe estar sentada las bases para lograr acuerdos políticos que permitan una transición hacia una economía verde, inteligente, y circular, con modelos de consumo y producción sostenibles, enfocada en el bienestar de todas las personas, y que enfrente las desigualdades, la pobreza y la precariedad.
Cambio climático: reto y amenaza
La Carta Medioambiental Iberoamericana sería el mayor acuerdo político al que la Conferencia Iberoamericana haya llegado en temáticas medioambientales.
Al pronunciar unas palabras en el acto de clausura, el presidente Abinader reiteró que no hay mayor reto y amenaza real que afecte a la humanidad como lo es el cambio climático.
Dijo que la comunidad científica ha advertido más de una vez sobre el problema que tienen los países iberoamericanos por la vulnerabilidad en la que se encuentran frente a esa realidad, que en ocasiones se ve incrementado por factores de pobreza, desigualdad y densidad poblacional presentes en los territorios.
Tras las reuniones durante los dos días del encuentro entre el 18 y 19 de julio, los países han adoptado por consenso la siguiente declaración que recoge, entre otras cosas, el compromiso reforzado con el Acuerdo de París para luchar contra el cambio climático y sus impactos.
Asimismo, avanzar en los diálogos para el establecimiento de metas ambiciosas como la de alcanzar la neutralidad de carbono a mediados de siglo o la protección del 30% de territorios marinos y terrestres para detener la pérdida de biodiversidad.
Más puntos acordados en la conferencia
Los países acordaron, de igual forma, fortalecer, consolidar y transversalizar la dimensión medioambiental y la lucha contra el cambio climático en todos los escenarios políticos y técnicos de la Conferencia y cooperación Iberoamericanas, reconociendo que esta lucha requiere de un abordaje holístico que involucre diversos sectores. También avanzar en la gestión integral de los recursos hídricos e impulsar la el fortalecimiento de la financiación.
