La joven comunicadora Chantal Jimenez Vargas, quien fue asesinada por Jensy Graciano Cepeda la noche del pasado Sábado Santo, tenía una orden de protección provisional tras denunciar a su agresor el pasado miércoles 5 de abril.
La orden emitida por Altagracia Brache Gómez, de la Unidad de Atención de Prevención de la Violencia de Género, Intrafamiliar y Sexual del Ministerio Público, obligaba a Jensy Graciano Cepeda a abstenerse de molestar a Jimenez Vargas.
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«Se obliga al señor Jensy Graciano Cepeda, abstenerse de molestar, intimidar o amenazar por cualquier medio, verbal o escrito, directo o indirecto, así como por la vía telefónica a la señora Chantal Jiménez Vargas», dice el documento.
Anteriormente, Graciano se había ido a la casa de Jimenez Vargas y supuestamente le disparó a los pies y le rompió sus pertenencias. Acción que llevó a la cárcel al joven pero fue liberado.
Se supo que pese a la denuncia que tenía Jensy y a las agresiones realizadas contra Chantal , el Ministerio Público no le quitó el arma de fuego.
Informaciones revelaron que el homicida se reunió con un tío de la víctima para comer y que él le aconsejó buscar otra mujer.
Chantal Jimenez Vargas se encontraba reunida ayer con una amiga cuando Graciano Cepeda le quitó la vida.
