Representantes de la iglesia católica, al pronunciar el Sermón de las Siete Palabras, cuestionaron duramente la corrupción y la delincuencia en el país y uno de ellos llamó “a vivir en verde por la esperanza de que somos entes del cambio”.
Durante la tradicional actividad, que se realizó en la Catedral Primada de América, la iglesia también reiteró su oposición al aborto y resaltó que en ocasiones “pareciera que la vida humana no tiene valor, porque estamos viviendo la incapacidad de amar y perdonar”.
La primera reflexión fue leída por el párroco de los Jardines del Norte, Elvin de los Santos, quien hizo referencia a la frase “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”, a través de la cual cuestionó la soberbia del poder y la impunidad frente a la corrupción.
Además habló de la muerte de la señora Delcy Yaport, fallecida el pasado 20 de marzo tras recibir un impacto de bala disparado en contra de dos ladrones y aseguró que “Este caso nos manifiesta el perdón a través de su esposo, quien pidió misericordia y oración para aquel que le cegó la vida a su esposa”, indicó.
Temor a los miembros de la PN
La segunda palabra, “Hoy estarás conmigo en el paraíso”, estuvo a cargo de José Mariano Gálvez, de Santo Domingo Este, quien lanzó una dura crítica a los políticos y religiosos que cimientan sus vidas en la brutalidad e instintos viciados.
“No basta un poco de buena voluntad de los que construyen paraísos terrenales a nivel político, social e incluso religioso; esas calañas de perversidad, instintos viciados, brutalidad y fango, no pueden entrar en el paraíso tan fácilmente”, aseveró.
En la tercera frase, “Mujer, ahí tienes a tu hijo, hijo ahí tienes a tu madre”, el padre Virgilio de la Cruz, condenó que las autoridades y especialmente los políticos no brinden seguridad a la ciudadanía y señaló que los ciudadanos tienen temor a los miembros de la Policía Nacional, “porque desgraciadamente en la mayoría de los atracos que se realizan, aparece la sospecha o certeza de su participación” y cuestionó a los legisladores que están a favor del aborto.
Vivir en verde esperanza
Asimismo, el párroco del Quinto Centenario, Carlos Manuel Frías, al hacer alusión a la quinta frase “Dios mío por qué me has abandonado”, resaltó que los casos de corrupción generalizada en todos los estratos sociales públicos y privados, así como los robos y la violencia, son producto de la pérdida de valores y de la metalización de las conciencias.
“Queremos vivir en verde no solo por la esperanza de una República mejor, sino por la esperanza de que somos entes del cambio, que nuestra vida sea verde y sea esperanzadora para los demás”, dijo.
Con la quinta palabra: “Tengo Sed”, el párroco de San Juan de Ávila, Alejandro Valera, resaltó que así como Cristo en el Calvario manifestó su sed, las familias dominicanas expresan su sed de los recursos necesarios para sacar adelante a sus familiares, de un país más digno y donde no exista la indiferencia.
“La delincuencia nos arropa y nos haconvertido en una nación con delirios de persecución e inseguridad”, refirió.
Durante la lectura de la sexta palabra, “Todo se ha cumplido“, pronunciada por el diácono Franco Antonio Luna, de la iglesia San Antonio de Padua, la iglesia católica criticó que muchos de los funcionarios no respondan a los casos de corrupción y se hagan sordos y mudos.
“Mientras el pueblo dominicano está preocupado porque se mejoren los indicadores de gestión en cada caso, muchos de los funcionarios no responden de igual manera, pues frente a cualquier reclamo del pueblo, al cual se deben, muchos de ellos se muestran indiferentes, arrogantes y prepotentes”, destacó.
Finalmente, en la séptima y última palabra, “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”, los religiosos calificaron de fallido el sistema judicial del país, por entender que las autoridades civiles y militares se dejan corromper por el afán de riquezas materiales y la obsesión de poder.
Corrupción ha sido tema de los últimos tres años
Durante los últimos tres años, la corrupción ha sido uno de los temas principales del Sermón de las Siete Palabras, que pronuncian los integrantes de la Iglesia Católica el Viernes Santo.
En el año 2015, los religiosos criticaron los niveles de corrupción en el país y aseguraron que “la Justicia es una vergüenza para todos los dominicanos”; mientras que en el 2016, denunciaron la contaminación del proceso político y la campaña electoral, así como la corrupción, el uso de los recursos del Estado y la creciente delincuencia y la criminalidad.
Para entonces el diácono Pedro Ramírez, exhortó a la sociedad a no sólo escandalizarse por la corrupción en el manejo de los fondos del Estado, sino también “por la corrupción de la conciencia” y pidió denunciar a los corruptos.
