Santiago. El crecimiento desordenado y sin control del mercado de pulgas que desde hace dos años opera en la comunidad Los Tocones en la autopista Joaquín Balaguer, se ha convertido en un problema y un peligro.
El registro de accidentes de tránsito por la negativa de algunos compradores y vendedores a utilizar el puente peatonal, unido a la expansión improvisada genera caos para los que transitan por la importante vía con destino hacia la Línea Noroeste, Puerto Plata o hacia Santiago.
Con la salida del mercado desde Pueblo Nuevo hacia la zona Oeste y el posterior traslado hacia Los Tocones, se pensaba que quedaría resuelto el desorden que se generaba cada jueves con la venta de ropas y otras mercancías.
Ahora resulta que en al menos un kilómetro de la autopista Joaquín Balaguer, una parte de la acera es tomada por camionetas, carros, autobuses y los vendedores informales, convirtiendo ese tramo en un verdadero peligro.
El mercado de pulgas fue levantado a escasos metros del canal Ulises Francisco Espaillat, a pesar de la advertencia que generó la medida por parte del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos. Los jueves, apenas colocan un agente de la Digesett, a pesar de que se requiere de al menos cuatro en un tramo de un kilómetro para poder organizar el mercado.
“Nosotros hemos visto cómo a cada rato se registran accidentes con personas que ocupan la acera o que se niegan a utilizar el puente peatonal y son embestidos por los vehículos y eso se debe a que no hay organización por parte delas autoridades tanto municipales como de las de tránsito”, apunta Domingo Matos, residente en la zona.
Moteles y las estaciones de combustibles se ven afectados cada jueves de mercado, debido a que los choferes de autobuses ocupan las entradas.
La pasada semana, al tomar dos días, por tratarse de la cercanía de la Navidad, el caos fue mayor. Al lugar acuden vendedores haitianos, de Santiago, de Moca, la Línea Noroeste, Santo Domingo y otros puntos del país.
