Santiago. La inversión de 42 millones de pesos para el saneamiento de una cañada y construcción de un parque se fueron por la borda, debido al descuido de las autoridades municipales.
Ambas obras, inauguradas en agosto del 2012 por la Comisión Presidencial de Apoyo al Desarrollo Barrial, presentan deterioro progresivo. La cañada tiene altos niveles de contaminación y está arropada por la basura, debido a la permisibilidad para que familias construyan viviendas en el afluente intervenido con encache.
La extensión de terreno destinado al parque sirve para que animales pastoreen, mientras algunas personas decidieron instalar anafes en los que preparan alimentos con fines comerciales. El espacio recreativo permite conectar desde la cabeza del puente en la carretera Jacagua hasta el barrio Camboya.
A poco tiempo de su construcción, fueron destruidas las lámparas del iluminado y parte de los hierros de los asientos fueron desmantelados por los delincuentes. “Los que vivimos por aquí disfrutamos poco del parque, pues la falta de vigilancia ocasionó que los ladrones cargaran con todo”, apuntó Francisco Jáquez, residente en la zona. Los comunitarios dicen que durante la gestión del entonces alcalde Gilberto Serulle, el espacio recreativo fue dejado a su suerte.
El pasado año, tras los huracanes Irma y María, el actual síndico Abel Martínez se presentó a la comunidad Los Reyes y prometió trabajar en su rescate. Hasta la fecha, los comunitarios siguen a la espera de que se haga realidad el sueño de poder contar nuevamente con un lugar donde compartir.
El descuido es tal, que los niños juegan con los pocos hierros que aún sirven del área infantil que fue levantada hace cinco años. El exregidor y dirigente del partido Acción Liberal, Domingo Ureña, lamentó que la inversión hecha para canalizar e higienizar la cañada se perdiera por la falta de mantenimiento. Cuestionó la falta de mantenimiento en obras donde el Gobierno o la misma alcaldía invierten.
