En la búsqueda del camino

Este fin de semana, el gobierno de Danilo Medina estará cumpliendo los primeros cien días, sin treguas ni pausas. La oposición…

Este fin de semana, el gobierno de Danilo Medina estará cumpliendo los primeros cien días, sin treguas ni pausas.

La oposición no le ha concedido el menor chance, ni siquiera para tomar impulso. Sólo durante unas horas, el 16 de agosto, cuando se instaló, pero inmediatamente después, ese mismo día, al conocerse el Gabinete, le enfiló los cañones. Hasta hoy. Más de seiscientas protestas han sido contadas.

El gobierno ha entendido la situación. Una parte de las protestas le vienen como herencia del gobierno del partido que lo llevó al poder, y las otras están asociadas a las políticas que ha debido ejecutar para tratar de salir hacia adelante, como la reforma fiscal.

Cauto frente a sus compañeros y tolerantes con sus contrarios, trata de abrirse camino, con el propósito de poner su gobierno sobre rieles. La economía tiene que reactivarse, parece la conclusión, si se da seguimiento a su proceder.

Los fenómenos naturales le brindaron la oportunidad para tomar iniciativas, y trata de enviar señales de su interés por superar la coyuntura, estimular acciones energizantes e iniciar el próximo año con nuevos bríos.

Algunas medidas orientadas a crear confianza, como la transferencia de las importaciones agropecuarias a la bolsa de la Junta Agroempresarial, el anuncio de la apertura de la ventanilla única para las inversiones, correcciones en el aparato estatal para estimular la confianza. Desafortunadamente, algunas acciones resultaron  disminuidas por el escándalo de las pensiones.

Pero otras iniciativas sugieren su empeño en darle dinamismo al país. El programa de financiamiento de las micro y pequeñas empresas, el plan para construir 10 mil aulas, “Navidad sin hoyos”, empleo de hombres en paseos de caminos y carreteras, transferencias de fondos a algunos productores del agro, concursos por provincias de pequeñas obras, y un adelanto de la Regalía en el sector público, en medio de una perceptible austeridad.

El hombre quiere mover la economía y tratar de disipar los nubarrones, dentro de los cien días y en vísperas del nuevo año. El gobierno trata de encontrar el camino.

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