Este año, República Dominicana verá el inicio de cinco grandes obras que impactarán positivamente a nivel social y económico, aseguró ayer el presidente Danilo Medina.En su rendición de cuentas con motivo de la Independencia Nacional, el mandatario informó que dos de esos proyectos iniciaron ya. En suma, Medina se refiere a la carretera San Juan-Santiago, que conectará las regiones Norte y Sur del país; la autopista Navarrete-Puerto Plata, que dará un fuerte impulso al Norte; la ciudad Juan Bosch, en la zona oriental de Santo Domingo; la presa de Monte Grande, en Barahona, y la extensión de la segunda línea del Metro de Santo Domingo hasta la zona oriental. Estas dos últimas obras fueron ya iniciadas.
La presa Monte Grande beneficiará a las provincias Barahona, Bahoruco e Independencia, incrementando significativamente la producción agrícola y llevando agua potable a los hogares de esos puntos geográficos, aseguró el mandatario. Cuando Medina se refirió a esa parte en su alocución, había “pasado revista” a un conjunto de carreteras terminadas por el Ministerio de Obras Públicas el pasado año 2013. “Ese circuito de carreteras del Este ahora conecta a Punta Cana con la Capital en menos de dos horas, además de permitir el acceso en poco más de una hora a otras zonas turísticas clave, como son La Romana y Bayahíbe”, apuntó el Presidente.
En concreto citó el Boulevard Turístico del Este, desde el Aeropuerto Punta Cana hasta Uvero Alto; la Circunvalación Romana, la carretera San Pedro de Macorís-La Romana; la Circunvalación San Pedro de Macorís y la carretera de acceso a Uvero Alto. Las obras que enumeró han servido de impulso a la industria del turismo, porque han permitido una mayor accesibilidad a los distintos puntos de la región. El jefe del Estado se refirió a otras obras viales ya realizadas que benefician a la agropecuaria y el comercio en la región Sur. Entre ellas, enumeró la carretera Cruce de Ocoa, el puente de Sabana Larga y la carretera 4 Bocas-Arroyo Dulce-Barahona.
