INTRODUCCIÓN
Antífona es una frase o pasaje breve, tomado con frecuencia de la Sagrada Escritura o inspirada en ella que se canta o reza en la liturgia de las misas y en la Liturgia de las Horas (a saber, laudes, tercia, sexta, nona, vísperas), antes y después de los salmos, de textos bíblicos o de cánticos diversos. Su contenido guarda estrecha relación con la celebración o fiesta litúrgica del día.
Sinónimo de antífona es “versículo”, es decir, un verso breve con gran unidad de sentido. Se la puede comparar con el “aforismo”, a saber, “sentencia breve y doctrinal”, que se propone como regla en alguna ciencia y arte” (Diccionario de la Real Academia).
La antífona es tan antigua como la Biblia y milenaria como la liturgia de la Iglesia. Cada una es una preciosa piecesita, que resume muchas ideas y es apta para reflexiones rápidas o largas, si se las da a tiempo.
Considero que el siglo XXI, con su valorización de las ideas rápidas y breves en ese género literario de las redes sociales llamado “Twitter”, nos ayudará a descubrir el valor perenne de las antífonas, versículos y aforismos. Se podría decir que ellos son formas antiguas del “Twitter” del tercer milenio y que éste sería una forma actualizada de aquellos tres con un nombre nuevo.
Si se observa bien, las antífonas litúrgicas no pasan normalmente de 140 caracteres. Viéndolas así son, técnicamente, auténticos “twitters”, y mirando su contenido se pueden definir como “gorjeos o trinos”, dichos a Dios o sobre Dios con estrecha relación con la vida de cada día.
He aquí las 48 antífonas que trae el Misal Romano para todo el tiempo pascual, el cual abarca ocho semanas, desde el Domingo de la Resurrección de Cristo hasta el Domingo de Pentecostés. Están señaladas para el Rito de entrada de la Misa y para el Rito de la comunión; y se repiten algunas, a veces, aquí y allá, a lo largo de los días de dicho tiempo de Pascua. También hemos enumerado las antífonas de las diferentes horas de la Liturgia de las Horas. Son más de 300 diferentes. Para una segunda entrega propondremos una selección de ellas, de acuerdo al espacio que nos exige esta columna.
Les invito, pues, a repasar estas 48 antífonas, versículos, aforismos, twiters, gorjeos o trinos en torno al Señor Resucitado, triunfante y gozoso. Y, ¿por qué no? Si alguno lo desea, siéntase libre de “retwitear” estos “twiters” llamados “antífonas”.
1- Cristo, nuestra víctima pascual, ha sido inmolado. Celebremos, entonces, esta fiesta con los panes sin levadura de la pureza y la verdad.
2- He resucitado, y estoy de nuevo contigo. Pusiste tu mano sobre mí; ¡qué admirable es tu sabiduría!
3- En verdad resucitó el Señor. Aleluya. ¡A él sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos!
4- El Señor hizo entrar a su pueblo en el país donde abunda la leche y la miel; que la ley del señor esté siempre en tus labios.
5- El Señor resucitó de entre los muertos, según lo había dicho; alegrémonos y regocijémonos todos, porque él reina para siempre.
6- El Señor dio de beber a su pueblo el agua de la sabiduría; él es el apoyo de sus hijos y no desfallecerán, él los exaltará para siempre.
7- Vengan, benditos de mi Padre, y reciban en herencia el reino que les fue preparado desde el comienzo del mundo.
8- Los discípulos reconocieron al Señor al partir el pan.
9- Señor, todos celebraron tu mano protectora; porque tu sabiduría abrió la boca de los mudos y soltó la lengua de los más pequeños.
10- Ustedes son un pueblo adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas a su admirable luz.
11- El Señor hizo salir de Egipto a su pueblo y lo llevó por un camino seguro; el mar sepultó a sus enemigos.
12- Jesús dijo a sus discípulos: vengan a comer, y tomó el pan y se lo dio.
13- El Señor hizo salir a su pueblo con alegría y a sus elegidos entre cantos de triunfo.
14- Todos los que fueron bautizados en Cristo, han sido revestidos de Cristo.
15- Como niños recién nacidos, deseen la leche pura de la palabra, que los hará crecer para la salvación.
16- Celebren con alegría su victoria dando gracias a Dios que los llamó a su reino celestial.
17- Acerca tu mano y reconoce el lugar de los clavos; en adelante no seas incrédulo, sino hombre de fe.
18- Jesús, poniéndose en medio de sus discípulos les dijo: la paz esté con ustedes.
19- Alegrémonos, regocijémonos y demos gloria a Dios, porque el Señor, nuestro Dios, el todopoderoso, ha establecido su reino.
20- El Mesías debía sufrir y resucitar para entrar en su gloria.
21- Te Alabaré entre las naciones, Señor, y anunciaré tu nombre a mis hermanos.
22- Dice el Señor: yo los elegí del mundo y los destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero.
23- Señor, cuando saliste al frente de tu pueblo, abriéndole camino y conviviendo con él, tembló la tierra y el cielo dejó caer su lluvia.
24- Nos has redimido, Señor, por medio de tu sangre, de todas las familias, lenguas, pueblos y naciones, y has hecho de nosotros un reino sacerdotal para nuestro Dios.
25- El Señor Jesús fue entregado por nuestros pecados y resucitado para nuestra justificación.
26- Padre, quiero que los que tú me diste estén conmigo donde yo esté, para que contemplen la gloria que me has dado.
27- ¡Aclame al Señor toda la tierra! ¡Canten la gloria de su nombre!
28- El Mesías debía sufrir y resucitar de entre los muertos al tercer día, y en su nombre debía predicarse a todas las naciones la conversión para el perdón de los pecados.
29- Resucitó el Buen Pastor, que dio la vida por sus ovejas y se entregó a la muerte por su rebaño.
30- Dice el Señor: les dejo la paz, les doy mi paz, pero no como la da el mundo.
31- Alaben a nuestro Dios, todos los que lo temen, pequeños y grandes; porque llegó la salvación, el poder y el reino.
32-Mi boca, Señor, proclama tu alabanza. Mis labios te cantarán jubilosos.
33- Cristo ha resucitado. Él ha hecho brillar sobre nosotros su luz, después de habernos rescatado con su sangre.
34- Cantaré al Señor que se ha cubierto de gloria. El Señor es mi fuerza y mi protección, él me salvó.
35- Cristo murió por todos, a fin de que los que viven no vivan más para sí mismos, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.
36- El crucificado resucitó de entre los muertos, y nos redimió.
37- Con Cristo fueron sepultados en el bautismo, y con él resucitaron, por la fe en el poder de Dios que lo resucitó de entre los muertos.
38- Dice el Señor: Padre, ruego por ellos, para que sean uno; para que el mundo crea que tú me enviaste.
39- Toda la tierra está llena del amor del Señor, y su palabra hizo el cielo.
40- Con gritos de alegría anuncien y proclámenlo hasta los confines de la tierra: el Señor ha liberado a su pueblo.
41- Dice el Señor: si me aman, cumplirán mis mandamientos. y yo rogaré al Padre y él les dará otro Paráclito para que esté siempre con ustedes.
42- Hombres de Galilea, ¿por qué siguen mirando al cielo? este Jesús que les ha sido quitado y fue elevado al cielo, vendrá de la misma manera que lo han visto partir.
43-Dice el Señor: no los dejaré huérfanos, volveré a ustedes, y se alegrará su corazón.
44- Yo soy el primero y el último, el viviente. Estuve muerto pero ahora vivo para siempre.
45- Vayamos confiadamente al trono de la gracia, a fin de obtener misericordia y alcanzar la gracia de un auxilio oportuno.
46- Dice el Señor: el Espíritu Santo me glorificará, porque recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes.
47- El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido dado.
48- El último día de la fiesta, Jesús, poniéndose de pie, exclamó: el que tenga sed que venga a mí y beba.
CONCLUSIÓN
CERTIFICO, que un día dije al Lic. Amaurys Rodríguez, mi Maestro de Ceremonias Litúrgicas: “Las antífonas de la Liturgia son como twiters”, que si él quería reunirlas todas para publicarlas como tales, cosa que él aceptó e hizo, y gracias a él hoy las pongo en manos de ustedes.
DOY FE, en Santiago de los Caballeros, a los catorce (14) días del mes de abril del año del Señor dos mil catorce (2014).
