Santiago. A las decenas de obras inconclusas, Abel Martínez, quien a asumirá como alcalde este martes, deberá afrontar una ciudad repleta de basura y una deuda de prácticamente 650 millones de pesos.A pesar de que las construcciones fueron el fuerte de la gestión por concluir que encabeza Gilberto Serulle hasta este 16 de agosto, quedan pendientes otras cuyo monto supera los 250 millones de pesos. Tan solo con los contratistas, durante el 2016, la Alcaldía hizo compromisos sin pagar por 256 millones de pesos.
Mientras que con las empresas recolectoras de basura Con Waste y Urbaluz la deuda es cercana a los cien millones de pesos. Con los suplidores es de 96 millones, según establece el regidor Domingo Ureña, representante del Partido Acción Liberal (PAL).
Entre las edificaciones inconclusas están la intervención del parque del sector Jardines Metropolitanos, el parque ecológico del sector El Ensueño y varias aprobadas en el presupuesto participativo y que nunca se cumplieron.
También queda en el limbo la terminación del mercado de Pekín, al sur de Santiago, cuya obra se encuentra en una etapa de un 75 por ciento.
“Los únicos beneficiados con los pagos han sido algunos suplidores, cuyos montos superan los cien millones de pesos, y es porque tienen cierta cercanía con el alcalde Gilberto Serulle”, apuntó Ureña al ser entrevistado por reporteros de elCaribe.
La pasada semana, la comisión de transición advirtió de los problemas que recibirá la próxima administración municipal que encabezará Abel Martínez, denunció que recibirá una administración plagada de irregularidades.
Desde supuestas ventas de espacios en cementerios, hasta presuntas mafias ligadas al pago por uso de vehículos, son de las denuncias que hacen los que ocuparán funciones en la nueva administración municipal. Sin embargo, el principal frente que deberá hacer la nueva gestión municipal será buscar nuevos equipos para la recolección de basura.
