Miles de niños, niñas, adolescentes y jóvenes de toda la geografía nacional celebrarán mañana el Día Mundial del Movimiento Juvenil, de la Iglesia Adventista.Este movimiento es también conocido como el Club de Conquistadores, una organización oficialmente aprobada en el 1950, y es patrocinada y dirigida por la Iglesia Adventista del Séptimo Día. La conforman niños, jóvenes y también adultos. Está dividida en diferentes clubes, según las edades.
El Club de Conquistadores se organiza a través de reuniones semanales y realiza actividades diversas, como excursiones, campamentos, retiros espirituales, caminatas, travesías y desfiles públicos. Igualmente, ferias, fogatas, exposiciones, ejercicios de primeros auxilios, operativos médicos y ecológicos, servicio comunitario y asistencia social.
Cada una de estas actividades tiene como objetivos el desarrollo físico, mental, social y espiritual de sus integrantes. A los participantes se les enseña disciplina, civismo ciudadano, organización, planificación, amor a Dios y a la Naturaleza que es su creación, en la cual se desarrollan gran parte de sus actividades.
Cada año se realizan cientos de campamentos y excursiones, incluido un viaje al Pico Duarte y a Valle Nuevo, congresos, cursos, seminarios, entre otras actividades recreativas y formativas.
Cada club está concebido como un soporte a la comunidad, cooperando en la limpieza, jornadas contra la violencia y los vicios, campañas de prevención de dengue y cólera y orientación ciudadana. “Y lo más importante, mantiene a los integrantes en un ambiente sano, alejado de los vicios, y desarrollando el potencial de sus miembros”, explica Juan José Eusebio, presidente de la comisión de Conquistadores de la Asociación Central Dominicana de los Adventistas (ACD).
Origen de la organización
El origen del Club de Conquistadores se remonta al inicio del Ministerio Juvenil Adventista, a partir de 1879, en Estados Unidos, con jóvenes como Lutero Warren. En el 1907 surgen los Misioneros Voluntarios (MV).
El ministerio encontró bastante apoyo y se expandió rápidamente, pero se hizo oficial en el año 1950, cuando la Asociación General de los Adventistas decidió aprobar al Club de Conquistadores como una organización oficial. Cada miembro adquiere el compromiso de representar y participar de la disciplina y organización de los Conquistadores.
Miles de personas han pertenecido a este movimiento en la Iglesia Adventista del Séptimo Día. En el pasado gobierno, el ex presidente Leonel Fernández donó los terrenos y ordenó la reconstrucción del campamento Adventista de Najayo, en San Cristóbal. Este lugar cuenta con una moderna instalación, y es donde se realizan grandes campamentos con esta misma temática.
Participantes aprenden unas 300 habilidades
Además de estudiar y profundizar sobre el amor a Dios a través de la Biblia, los conquistadores pueden aprender en esta jornada de unas 300 habilidades, entre las que figuran la realización de nudos, amarras, marcha militar, primeros auxilios, rescate, natación, supervivencia, orientación, campismo, manualidades, reciclaje, numismática, aeromodelismo, salto a rapel, espeleología, ciclismo, música, fuego y cocina, computación e idiomas.
