¿Cómo ha influido en ti el hecho de nacer en una familia de músicos? Me facilitó el aprendizaje, practicar no era una tarea mía sino una actividad en conjunto. En las reuniones familiares terminabamos todos tocando.
¿Recuerdas la primera pieza que te aprendiste? En realidad no, pero sí recuerdo que memorizaba y tarareaba todas las piezas que mi hermano mayor practicaba en casa.
Al momento, ¿cuál ha sido la experiencia profesional que más has aprovechado? Este verano participé en la gira centroamericana de la YOA, una vivencia enriquecedora. Fue un contacto con la vida profesional musical: los colegas eran de alto nivel y el repertorio, retante. Además del gran número de conciertos realizados mientras duró.
La magia del violín radica en… El sonido. ¿Cómo puede llegar a ser tan personal que refleje la personalidad del compositor o intérprete? Simplemente magia.
¿Algún violinista en particular? Me he interesado por los nuevos debido a sus conceptos interpretativos. Algunos salen de los estándares tradicionales pero con buen gusto; jovialidad en su ejecución. Muchos han nacido en las competencias internacionales como Ray Chen y Karem Gomyo. Pero antes de ellos, Ithzak Perlman es una escuela.
Si tuvieras que elegir tres obras para un programa sinfónico, ¿cuáles serían? Obertura de Festival Académico (J. Brahms), Concierto para violín y orquesta (J. Sibelius) y Sinfonía No. 2 (S. Rachmaninov).
¿Qué es lo más difícil de este mundo? No es igual empezar tu carrera profesional a los 7 años que a los 18. Es un mundo muy competitivo, hay que mantenerse en constante y ardua práctica.
Una pieza que todos deben conocer es… Concierto para violín y orquesta de J. Brahms.
¿En qué proyectos andas inmersa? Junto a tres amigos colegas formo parte del cuarteto de cuerdas José Reyes, que nace de nuestro deseo de formar un grupo de música de cámara. Tenemos pensado realizar una serie de conciertos el próximo año. Ya les informaremos.
¿Hacia dónde te diriges? El futuro dicta continuar mis estudios académicos: maestría, doctorado en línea de ejecución, sea solista o música de cámara. Acercarme a la docencia, preparando el relevo musical.
