BRASILIA (AP) — La deforestación en la Amazonia brasileña volvió a crecer en junio para alcanzar 312,7 kilómetros cuadrados de destrucción después de una disminución el mes anterior, informó el martes la agencia espacial del país.
Según el Instituto Brasileño de Pesquisa Espacial (INPE), la mayor parte de la devastación del bosque húmedo se dio en el estado de Pará, que tradicionalmente es escenario de violencia en la lucha por la tierra.
La cifra de junio refleja un incremento desde mayo, cuando fueron talados 267,9 kilómetros cuadrados del bosque que cubre el norte de Brasil y se considera la mayor reserva de biodiversidad del mundo, según el INPE.
Junio marca el inicio del período seco en el bosque, que coincide con el momento de auge de la tala ilegal en la Amazonia.
La deforestación en la Amazonia generó alarma cuando las cifras dispararon entre marzo y abril, alcanzando más de 500 kilómetros cuadrados en un momento tradicionalmente de baja destrucción del bosque. En 2010 la tala ilegal en la Amazonia alcanzó poco más de 100 kilómetros cuadrados en esos meses.
El gobierno instaló en esa ocasión un gabinete de crisis para coordinar una operación de emergencia destinada a contener la destrucción del bosque húmedo.
