Santiago. El traslado de los vendedores improvisados del mercado de pulgas del sector Pueblo Nuevo al local que habilita la alcaldía de Santiago, tendrá que esperar al próximo año.Y es que los trabajos de acondicionamiento y construcción de oficinas administrativas se encuentran en fase avanzada y se espera estarán listos para mediados del mes de enero del 2017. Varios obreros trabajan en la terminación de toda la verja perimetral del nuevo mercado, ubicado a escasa distancia del cementerio de El Ingenio y el residencial El Ejecutivo que ha rechazado su instalación en este sector de la parte oeste de Santiago.
Recientemente el alcalde Abel Martínez informó que trabajan de manera ardua para reubicar a los vendedores informales del mercado de pulgas de Pueblo Nuevo, luego de las quejas de diversos sectores. El jurista Ramón Antonio (Negro) Veras en un artículo reciente, lamentó que Santiago, como ciudad, viva agrietamiento social como consecuencia de la debilidad del ordenamiento económico vigente; “en ella los vivos y los muertos resulten víctimas del caos existente”.
Pone como ejemplo, de que si por coincidencia fallece un día jueves, y su velatorio se efectúa en la funeraria situada frente al Cementerio de la calle 30 de Marzo en Santiago, se va a morir dos veces por lo que ocurre en el mercado de las pulgas que hace varios años comenzó en la plaza pública de la J. Armando Bermúdez, en Pueblo Nuevo, y ya se ha extendido hasta la esquina de la 30 de Marzo con Independencia.
“Lo que se observa en el citado lugar los días jueves de cada semana, no se puede describir con palabras; aquello hay que verlo para comprender lo que es el Santiago de hoy en lo que a decadencia se refiere; eso da grima, espanta, hace llenar de asombro hasta al ser humano más pasible. La foto que encabeza este trabajo lo explica todo”, apunta Veras.
Veras indicó que el mercado de pulgas constituye una afrenta, una desvergüenza, un bochorno para toda persona sensible, decente y con un mínimo de sentido cívico.
