En la mañana de ayer, Blas Peralta, imputado por la muerte del exrector de la UASD, fue trasladado a la cárcel de Anamuya en Higüey, donde deberá cumplir un año de prisión preventiva, pero con ello se violó la orden del tribunal que dispuso otra cárcel para cumplir la coerción.
Su traslado se realizó en atención a la orden de coerción dictada por el juez Alejandro Vargas, por su presunta participación en el asesinato del catedrático y candidato a senador por la provincia de San Cristóbal, Mateo Aquino Febrillet. La información fue confirmada a elCaribe por una fuente vinculada al Nuevo Modelo Penitenciario, quien aseguró que Peralta fue trasladado solo al mencionado recinto, mientras que Franklin Vanega, Geraldo Félix Batista y Rafael Herrera Peña fueron enviados a La Romana.
Con este traslado se violó la disposición del juez Vargas, quien ordenó que Blas Peralta cumpliera la medida, junto a los otros tres imputados, en el Centro de Corrección y Rehabilitación Cucama de La Romana, tal y como lo había solicitado la Procuraduría.
