El boxeo es un deporte de mucha pasión y, además, de alto arraigo en el seno de las masas populares dominicanas.
El boxeo, especialmente en nuestros países (América Latina y la región del Caribe), es el deporte de los humildes, de los más pobres, pero también es seguido por segmentos de la llamada alta sociedad.
Prueba de ellos hay “al canto”.
El 90 por ciento de los boxeadores salen de los estratos más paupérrimos.
Asimismo, la mayoría de los campeones mundiales ha salido de la pobreza extrema.
Pero también el boxeo ha servido para rescatar de la delincuencia a jóvenes que, además, han sido atrapados por las drogas y la miseria en sentido general.
El boxeo ha sido ente de rescate y regeneración de miles de muchachos que, gracias a ese deporte, se convirtieron en ciudadanos exitosos y decentes.
José Longo y sus amigos
¿Qué podemos decir del softbol?
El softbol, cuya diferencia con el béisbol es mínima, es -como el boxeo- un deporte de masas, seguido por cientos de miles de deportistas.
Del softbol hablaba en días pasados con el amigo José Longo Gómez. En la plática también participó el colega Renaldo Bodden.
Longo Gómez, enfermo con el softbol, está convencido que este deporte es tan popular como el béisbol. Y nadie debe rebatirle esa opinión.
Precisamente, para que no se pierda la tradición softbolística de su entorno, por ahí regresan Los amigos de Longo.
Es un grupo deportista que reúne a muchos veteranos del softbol y en el que, además, sirve para solidificar una sincera amistad. José Longo saber hacer amigos.
Este columnista, que nunca le ha puesto la mano a un guante para jugar softbol, está consciente que esta disciplina tiene gran arraigo en el país.
Longo, profesional de la gerencia empresarial, no quiere que el softbol se vaya de su entorno. Trabaja para que su softbol vuelva con “todos los hierros”. Ya regresan ¡los amigos de Longo!
