Yaguate. El director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo, Alejandro Montás, encabezó ayer el inicio de los trabajos para reparar la avería que ha dejado sin agua a más de 40 sectores del Distrito Nacional.El funcionario se trasladó hacia la comunidad de Boca Mana, en San Cristóbal, donde se encuentra la tubería de 67 pulgadas, que suple 77 millones de galones de agua diariamente y que resultó afectada por las lluvias ocasionadas por la tormenta Sandy.
Montás explicó que se trabaja en la canalización del río Nizao y en el drenaje de la tubería afectada.
Sostuvo que para paliar la escasez que afecta a alrededor de un millón de personas en el Distrito Nacional, se ha dispuesto más de 100 camiones cisterna para suplir el líquido mientras se finalizan los trabajos. “Le estamos dando prioridad a los hospitales, a las escuelas y a los edificios públicos que por su estrategia demandan de agua potable”, dijo.
A la labor se han unido camiones de los sindicatos de agua, del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), la Cruz Roja y otras instituciones.
El costo aproximado de la obra ronda los RD$35 millones e incluirá la construcción de muros de gaviones para proteger una escuela rural y una policlínica, así como la canalización del río y la construcción y preparación de un dique.
“Hubo un pequeño descuido”
Montás admitió que en los trabajos realizados en ese lugar durante el paso de la tormenta Irene en 2011, “hubo un pequeño descuido” y quedaron inconclusos, pero prometió que esta vez sería terminado por completo para evitar pérdidas cuantiosas.
“En aquel entonces hubo una soldadura de la tubería y la pieza se selló, pero ahora con el impacto de una roca que ustedes ven por ahí se rompió”.
Agregó que más de 100 obreros trabajan las 24 horas con el fin de normalizar el servicio a más tardar el próximo sábado a partir del mediodía, por lo que exhortó a la ciudadanía a racionalizar el líquido, principalmente a los lavaderos de vehículos a fin de no desperdiciarla.
Escepticismo
Moradores de la comunidad manifestaron el peligro que significa la crecida del ríocuando llueve.
Santa Mojica, directora del plantel escolar Boca Mana, ubicado a escasos metros del arroyo, pidió a las autoridades la construcción de un muro que impida que un nuevo fenómeno atmosférico les cause problemas.
Mientras que Juan Valdez se quejó de la mala calidad de los trabajos efectuados en el 2011, tras la avería causada por Irene. “Parece que se robaron el dinero los ingenieros que vinieron, porque lo que hicieron fue soldar eso y echarle tierra encima”.
Es la segunda avería en 22 años
En tanto, que el subdirector de Operaciones de la CAASD, Luis Salcedo, señaló que en 22 años en funcionamiento, es la segunda vez que se produce una avería de esta magnitud en el que constituye el acueducto más grande de Centroamérica y el Caribe. “Es la segunda vez que tenemos que recurrir a la salida de una de las líneas”. El funcionario agregó que la presa de Valdesia se encuentra en óptimas condiciones.
