El cáncer de vejiga ataca principalmente a los hombres y entre los factores de riesgo están el tabaquismo y los problemas renales.El cáncer de vejiga es el quinto en frecuencia entre los hombres en países desarrollados (tras los tumores de próstata, pulmón, colorrectales y de estómago), con aproximadamente 357.000 nuevos casos al año en todo el mundo (274.000 hombres y 83.000 mujeres).
En Estados Unidos se presentan cada año 70 mil nuevos casos. Uno de los mayores peligros es que se manifiesta generalmente como una molestia leve y los pacientes no le dan importancia.
Cuando se presenta localmente, sin metástasis, debe ser tratado por los urólogos, radioterapeutas y oncólogos; pero si pasa a escenarios más complicados, las metástasis deben ser combatidas por los oncólogos.
El síntoma más común del cáncer de la vejiga es la hematuria o sangre en la orina, tornándola turbia o de color rojo. Otro síntoma es el dolor al orinar y la frecuencia de la micción. La mayoría de los pacientes con cáncer de la vejiga no presenta otros síntomas, no obstante, la mayoría de este tipo de cáncer no se diagnostica hasta que se encuentra en un estado muy avanzado.
De acuerdo con el oncólogo Sunil Daryanani, quien fue traído al país por la Unidad de Radioterapia de la Clínica Abreu , para exponer el el tema, en el Congreso de la Sociedad Dominicana de Hematología y Oncología, cuando se presenta este tipo de cáncer, el objetivo de los médicos es preservar la vejiga, cuya función es almacenar la orina generada en riñón.
“El 75% de cáncer de vejiga aparece de forma superficial y es de control sencillo, y lo manejan los urólogos, pero si hay metástasis, la situación del paciente se complica pues cambia totalmente su calidad de vida”, comentó el especialista.
