Los inmortales nunca mueren… ¡y Fausto -Ceja- Rodríguez es un inmortal del deporte continental!El tiempo vuela. Este 14 de agosto Ceja Rodríguez, el boxeador más carismático que ha parido República Dominicana, cumple 39 años de fallecido.
Su trágica muerte se registró el 14 de agosto de 1977. Murió en un fatal accidente automovilístico ocurrido en la entonces resbaladiza autopista Las Américas.
Regresaba de la playa de Boca Chica junto a su esposa e hijo (un niño de apenas poco más de un año). El suceso fue más trágico porque, además de la muerte de nuestro inolvidable Ceja Rodríguez, también fallecieron su consorte y su pequeño vástago.
Cada aniversario de la ida del popular púgil nacido en San Carlos -también mi barrio- le dedico un artículo para recordar su memoria… ¡porque no olvido a mis muertos!
Lo recuerdo especialmente para que los deportistas de estos tiempos conozcan, a grandes rasgos, la figura de este gigante del boxeo dominicano.
Una tarde lluviosa en San Carlos… sí, eran las cuatro de la tarde (domingo) cuando recibí la terrible e infausta noticia.
Me encontraba con unos amigos, como era costumbre, en el colmado Mejía ubicado en la esquina que forman las calles Juan Bautista Vicini y Álvaro Garabito de San Carlos.
“Oiga, oigan, a ustedes… acaba de morir Cunino. Murió hace unos minutos. Sufrió un accidente cuando venía de Boca Chica junto a su familia”.
Así gritó un muchacho del barrio al vernos metidos en el colmado Mejía cherchando y viendo caer el fuerte aguacero que se dejaba sentir a cántaro en la capital.
Todos nos quedamos absortos y a la vez incrédulos al ser informados de la trágica muerte de Cunino. Cunino era el apodo de Fausto Rodríguez. Así era conocido en San Carlos.
¡Oh Dios, qué desgracia!
Rodríguez, a casi cuatro décadas de tu muerte, el pueblo deportista te recuerda… ¡nunca te olvida!
