La semana pasada el fotorreportero Juan Sosa, del periódico Hoy, fue maltratado por un agente policial al servicio de la Policía Judicial. Sosa solo cumplía sus obligaciones laborales, y tomaba fotografías a los procesados por tráfico de cocaína. Las personas que son llevadas a los tribunales porque están en conflicto con la ley suelen tratar de ocultar sus rostros y se comportan agresivos con los periodistas. Si bien los policías están allí para garantizar la seguridad de los prevenidos, deben también contribuir a que los periodistas cumplan su misión y, si fuese necesario, protegerlos. No agredirlos. Pero prefieren “cuidar la imagen” de presuntos criminales. Es un excesivo celo que sus superiores deben observar.
Celo excesivo
La semana pasada el fotorreportero Juan Sosa, del periódico Hoy, fue maltratado por un agente policial al servicio de la Policía Judicial. Sosa solo cumplía sus obligaciones laborales, y tomaba fotografías a los procesados por tráfico de cocaína.
