Charlie ama a su país

Ayer, al ver una foto de Charlie Villanueva en la que mostraba el escudo nacional tatuado en uno de sus antebrazos, me llegó a la mente una…

Ayer, al ver una foto de Charlie Villanueva en la que mostraba el escudo nacional tatuado en uno de sus antebrazos, me llegó a la mente una serie de preguntas en relación con el manejo del caso Charlie y la selección nacional de baloncesto.

No sé por qué, pero sentí que Villanueva trata de enviar un mensaje codificado con la publicación de esta foto y otros tantos tuits en su cuenta de Twitter.  Él acompañó la imagen con el siguiente mensaje: “Amo a mi país”, escrito en inglés.

El equipo nacional tendrá en 2013, en Venezuela, la oportunidad de conseguir un boleto para asistir al mundial de 2014 en España y me parece que con las millas recorridas que tiene la selección quisqueyana bajo la administración privada, esta vez las cosas van a ser más fáciles que nunca. Hay muchas razones que me hacen pensar así, una de ellas son los cinco boletos disponibles en este campeonato y, claro, la ausencia del equipo de los Estados Unidos.

Pero primero hay que llevar el mejor equipo posible a Venezuela y entiendo que con Charlie se ayuda bastante a hacer más real esta premisa. Por eso, ruego que a casi dos meses después de oro en Centrobasket y el fallo en clasificar a los Juegos Olímpico en Venezuela, alguien, ya sea de la Federación Dominicana de Baloncesto o de la firma privada que manejó el conjunto, haya hablado con Charlie.

Hasta hace unos días ninguna de las partes lo había hecho, algo que elCaribe pudo constatar. Ojalá y ese no sea el caso, pero alguien debe fungir como bálsamo y pasarle una mano a Villanueva, quien no quedó nada contento con la forma como fue excluido del equipo tricolor.  Todos nos hacemos esta misma pregunta: ¿Tendrá Charlie la intención de volver a vestir la franela dominicana?

Él no ha hablado al respecto y uno espera que sí, pero igual aconsejo no esperar hasta el próximo año para hablar con él sobre el particular.  Si los responsables entienden que fue una mala decisión dejarlo fuera entonces habrá que hacérselo saber, tal y como sucedió con Luis Flores, que tras el oro de Centrobasket, recibió llamadas para que se uniera a la tropa local en Venezuela.

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