Charlie Hebdo y ¿la libertad de expresión? (y III)

¿Qué se entiende por libertad de expresión? Sabemos que desde que la prensa escrita fue fundada, en el contexto espacio-temporal que sea, fue controlada por quienes la publican.

¿Qué se entiende por libertad de expresión? Sabemos que desde que la prensa escrita fue fundada, en el contexto espacio-temporal que sea, fue controlada por quienes la publican. Como caricaturista, me siento en la obligación de salir en defensa de la libertad de expresión. Me explico. Todo el mundo tiene derecho a expresarse libremente, sin embargo, en una sociedad hay reglas de convivencia que hacen que muchas manifestaciones deban tener un cierto marco de aceptación.

¿Desaparecieron ya todas las reglas éticas del periodismo? Sin necesariamente hablar de blasfemia, que corresponde al desacato de los fieles de una religión, ¿puede cualquiera en aras de la libertad de expresión injuriar a quien sea? ¿Se puede acusar de ladrón por tener derecho a la libertad de expresión a quien se quiera sin la más mínima prueba?

Al arte, y la caricatura es parte de él, es la única rama o manifestación del ser humano, que se le quiere vulgarizar su sentido profundo y profesional. De la misma manera que cualquier embarre sobre una tela no es arte; en dibujo, cualquier garabato tampoco lo es. Esto no quiere decir que al que le dé su gana no embarre y garabatee a su gusto. Incluso, si se quiere hacer una sociedad de garabateadores y publicar una revista, tienen todo el derecho. El público no necesariamente es quien le va a dar la razón de su validez o no. ¿Para qué, entonces, existe la Historia del Arte? Y justamente cuando se tiene apego a la Historia del Arte, se tiene apego a la ética y la estética. No hay que confundir esto con lo políticamente correcto, que es la excusa para hacer todos los disparates sin ton ni son. ¿Hay alguien más combativo que Charlie Chaplin en el cine? Su única arma fue el talento y la genialidad. En ningún momento Chaplin rozó lo vulgar. En la historia de la caricatura francesa, que ha tenido mucho de islamofobia, se presentaron críticas a otras culturas de manera sutil, pero nunca llegando a la vulgaridad y la confrontación. América latina, África y Asia han sido objeto de grandes burlas desde la “superioridad” colonial europea como se refleja en Tintín en el Congo (aunque de factura belga, tuvo gran difusión en Francia), los haraganes y dormilones mexicanos de Lucky Luke (de Morris y Gosciny), el Iznogoud de Tabaré es una burla abierta al mundo musulmán, aunque con más creatividad. Es total ignorancia defender la supuesta rebeldía y combatividad de Charlie Hebdo. La rebeldía propone un eslabón más elevado en la escala humana. Peor aún decir que ellos representan iconográficamente a Francia. Conozco bien la producción francesa por mis 25 años de estancia en Quebec. Cuando pienso en la caricatura francesa pienso en tres vertientes: caricatura, dibujo de humor e historieta. En el primero hay que hablar del trío Mullatier, Ricord, Morchoisne. La producción de estos fue enorme, se burlaron de todos los políticos, de todos los faranduleros tanto de periódicos como de radio, televisión y cine; pero siempre con la altura de la genialidad. ¿Necesita un escritor mencionar la palabra mierda cincuenta veces para que se le considere de avanzada, rebelde y/o revolucionario?

En el dibujo de humor hay un batallón de magníficos humoristas que nunca necesitaron de la necedad y la provocación para expresarse y mostrar sus talentos. En Sempé, que es como el Quino de Argentina, su dibujo es poético, lleno de simbologías usadas inteligentemente, un dibujo suelto y libre propio para hacer crecer la humanidad. No para llenarla de amargura y odio. ¿De qué sirvió el ejemplo de Folón a las nuevas generaciones? ¿Quién puede decir que Folón no es un maestro de la belleza plasmada en sus acuarelas humorísticas; un humor para hacer reír, para hacer reflexionar, para educar, para vivir? ¿Quién no conoce a Plantu como dibujante de Le Monde? ¿No es acaso Plantu un gran ejemplo de cómo hacer las cosas usando la inteligencia y no lo obvio? Cuando se hojean los libros de Michel Bridenne, de André Barbe y Fred es imposible no reír y al mismo tiempo admirar la riqueza de la imaginación del ser humano.
¡Cuántas propuestas interesantes nos llegaron de Siné, Cheval, Trez, Tim! ¡Qué hermosura los dibujos de André Geerts! Hay en ellos muchísimas ideas muy osadas, y hasta podría afirmar que no son políticamente correctas. Sin embargo, ninguno cae en la vulgaridad. De hecho, la República Francesa censuró y etiquetó a Charlie Hebdo como una revista para adultos por su contenido altamente morboso.

En la línea de las historietas es innombrable la cantidad producida, sin dejar de mencionar a Asterix y Obelix de Uderzo y Gosciny, que son ya clásicos de la cultura francesa de los últimos 50 años. No estoy diciendo que hay que hacer lo mismo, estoy hablando de continuar una línea que viene desde las historias de Robert et Macaire de Daumier en la época de la Comuna parisina. Otro motivo de burla en Charlie Hebdo fue el uso de la burka (el velo que cubre a toda la mujer musulmana con excepción de los ojos). En una caricatura se mostró a una mujer desnuda diciendo que sí, que el porte debía hacerse al interior (de las nalgas).

En definitiva, Charlie Hebdo se ha querido presentar como una revista libre con lo que estamos de acuerdo, pero también de incitar al odio al mundo musulmán, asociando a todo el inmigrante como terrorista, al mismo tiempo que Hollande, Marine le Pen y su partido de ultraderecha, Le Front National, ejercen presión contra esta parte de la población y mantienen esa política hipócrita y colonialista que divide a la humanidad.

Defiendo a “rajatablas” la publicación de Charlie Hebdo aunque no esté de acuerdo ni con la forma ni con el contenido porque creo en la libertad de expresión. Me pregunto, de manera ingenua, si esta Francia que quiere presentarse como la abanderada de la libertad de expresión permitiría que alguien publicara caricaturas de burlas a los cuatro caricaturistas víctimas del atentado del 7 de enero.

En cuanto a la forma me parece que más que humor, las viñetas de Charlie Hebdo son pequeños afiches de propaganda. Sabemos que para hacer un afiche se necesita de un slogan y una ilustración. Esta puede ser una foto un dibujo o una caricatura que refuerce el mensaje. Pero realmente no hay ningún humor en esas viñetas. ¿Puede alguien reírse o siquiera sonreírse al ver un dibujo de Mahoma de los que aparecen en Charlie Hebdo desde que occidente se ha empeñado en invadir a Irak, Afganistán, Libia, Egipto, Siria y otros espacios allende el mar?

Con Voltaire o con quien lo haya dicho repito: “ …no estoy de acuerdo con lo que tengas que decir; pero defenderé con la muerte tu derecho a decirlo…” l

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http://www.infobae.com/2015/01/07/1619564-esto-fue-una-declaracion-guerra-no-un-atentado

http://cinegnose.blogspot.com.br/2015/01/o-atentado-ao-charlie-hebdo-foi-um.html#more

http://actualidad.rt.com/actualidad/162757-inteligencia-argelia-francia-ataque-advertencia

http://www.cubadebate.cu/noticias/2015/01/12/la-foto-de-la-marcha-de-paris-que-genero-polemica-en-la-red/#.VLUWYnuMJtQ

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