Estambul (dpa).- La cifra de muertos por el terremoto de magnitud 7,2 ocurrido el domingo en el este de Turquía aumentó hoy a 366, mientras los heridos suman más de 1.300, informó hoy la televisión CNN en turco citando el gabinete de crisis del gobierno.
Los equipos de rescate continúan hoy mientras tanto la búsqueda de posibles supervivientes y de cadáveres. Los efectivos rescataron con vida en Ercis a un recién nacido de entre los escombros, con sólo unos días de vida. «Está sano y vivirá», dijo a dpa el médico que lo vio. Sin embargo, no se sabe nada de los padres.
También un joven de 18 años fue rescatado durante la noche, tras pasar 32 horas bajo los escombros.
El sismo destrozó parte de la provincia oriental de Van. Según el centro de crisis del gobierno, se registraron 2.262 edificios destruidos, informaron hoy medios turcos.
La Media Luna Roja llevó hoy 12.000 tiendas de campaña adicionales a la zona de crisis para dar cobijo a cada vez más damnificados. En lunes, la organización repartió 452 tiendas de campaña, pese a lo cual mucha gente tuvo que pasar la noche a la intemperie, desatando críticas entre las filas del propio partido gobernante AKP.
Durante la noche y esta mañana se produjeron nuevas réplicas en Ercis. Las autoridades pidieron a la gente que no vuelta a los edificios dañados.
Hasta el momento fueron enviados a la región más de 2.300 efectivos de rescate. Las autoridades enviaron 200 ambulancias y cinco aviones ambulancias, apoyados por fuerzas militares.
El gobierno rechazó ayuda extranjera. La provincia de Van se sitúa en el sureste del país y hace frontera con Irán. La mayoría de sus habitantes son kurdos.
