Comunicador condenado a 30 años busca pasar año en casa por tuberculosis

San Pedro de Macorís.-Un tribunal se reservó para el 29 de enero próximo el falló que podría favorecer al comunicador de La Romana, Frank Beras, condenado a 30 años por el asesinato de su mujer  y que solicitó un año de prisión domiciliaria&#823

San Pedro de Macorís.-Un tribunal se reservó para el 29 de enero próximo el falló que podría favorecer al comunicador de La Romana, Frank Beras, condenado a 30 años por el asesinato de su mujer  y que solicitó un año de prisión domiciliaria hasta recuperarse de su tuberculosis.

La audiencia para que se le conceda la permuta temporal de la pena fue conocida por el juez Faride Abud, juez de Ejecución de la Pena en la Corte de Apelación de San Pedro de Macorís.

Beras guarda prisión en El Seibo por el crimen  el 5 de febrero de 2008 de su compañera sentimental Flérida Carrión (Janet), de 29 años, en La Romana. Además de tuberculosis, padece diabetes.

En hecho de sangre ocurrió en La Luisa, próximo al Batey Cacata, donde ambos habrían  tenido una discusión. Para ese entonces Beras, ahora con 39 años, declaró que ella le produjo rasguños en cuello y pecho.

Salieron del vehículo y le propinó unos punetazos que la aturdieron hasta caer al suelo, según su versión. Luego, tomó una piedra de unas 30 libras y se la dejó caer en la cabeza, provocándole el hundimiento del cráneo y la frente.

El cuerpo fue encontrado en unos matorrales, donde estaba una cadena del productor televisivo. Esa prenda y los rasguños fueron la clave del caso, ya que Frank Beras pasó el día «buscándola» ante familiares y amigos, y luego se presentó llorando en la morgue del hospital público «Francisco A. Gonzalvo».

El homicida la buscó en la mañana en la Ferretería Detallista, empresa de La Romana donde se desempeñaba como promotora. Estaban separados, pues el comunicador mantenía también una relación sentimental con Dorilena Reyes Rodríguez, con la que procreó dos niños.

Con Janet tuvo una niña que por entonces tenía 8 meses. Pero ella había procreado una niña junto a Agustín Santillán (Tin), quien tras la tragedia viajó con la menor, ahora con 15 años, desde los Estados Unidos.

Un tribunal de primer grado lo condenó a 20 años y luego, la Corte de Apelación de San Pedro de Macorís, elevó la pena a 30 años.

En la cárcel conoció a una predicadora evangélica, su actual pareja sentimental.

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