Santiago.-Los propietarios de apartamentos se aprestan a someter a la justicia la Iglesia católica en Santiago y en su defecto el párroco de la iglesia Santa Cecilia ante la demolición de la casa club para construir una iglesia y un centro comunal.
Los comunitarios acusan al sacerdote William Almonte de la parroquia Santa Cecilia de estar detrás de los planes de dejarlos sin áreas verdes.
Y es que tras dos semanas de haberse detenido los trabajos de demolición del espacio recreativo para llegar aun acuerdo con los moradores, en la mañana de este martes los afectados se vieron con la sorpresa de que equipos pesados terminaron de destruir lo que quedada.
Claudio Durán, en representación de la comunidad, dijo que en las próximas horas acudirán ante la justicia para que sea esta la que dilucide el conflicto.
Dice que la comunidad vino a enterarse el pasado día dos de mayo de que existía una autorización del Instituto Nacional de la Vivienda (INVI) que le autorizaba a la iglesia ocupar el área verde.
Como comunidad estaremos de frente, si hay que someter al padre lo haremos, si también tenemos que hacerlo con el INVI o la misma iglesia también”, refiere Durán.
De su lado, Francisco García, encargado de la obra aclaró que otorgaron un compás de espera para iniciar los trabajos del centro comunal y la iglesia, debido a que buscan el consenso de las partes.
Dijo que cuentan con todos los permisos legales para empezar los trabajos.
Para impedir enfrentamientos y facilitar la fuerza pública para que terminaran la demolición del local, agentes policiales y militares fueron apostados con armas largas.
