El corazón de la tierra de la libertad

Repítalo un millón de veces porque es cierto. Es una verdad que nadie está en capacidad de denegar: Nueva York sigue siendo la capital del mundo…y, además, una de las metrópoli (de todo el orbe) de más afluencia turística.

Repítalo un millón de veces porque es cierto. Es una verdad que nadie está en capacidad de denegar: Nueva York sigue siendo la capital del mundo…y, además, una de las metrópoli (de todo el orbe) de más afluencia turística.No importa que usted la haya visitado decenas de veces, porque siempre que haga un nuevo viaje, por estos predios, muchas cosas podrá ver que no vio en sus anteriores estancias.

Este periodista, que ha estado por aquí en más de un centenar de ocasiones, también da testimonio de que esta ciudad es excepcional y siempre tiene innovaciones.

Fernando Navarro, veterano locutor dominicano, “se desborda” cuando de resaltar las cosas singulares de Nueva York se trata. Y dice:
“Esta ciudad es lo máximo”. Navarro, nativo de Azua de Compostela, provincia situada en la región sur de República Dominicana, escribió un libro que titula “Nueva York por arriba y por Abajo.

En la obra refiere el status de los inmigrantes hispanos, pero hace hincapié en los dominicanos e igualmente en los negativos acontecimientos…¡porque también los malandros y la delincuencia dejan sus estelas en esta ciudad!

Pero para Fernando Navarro lo positivo, por mucho, pesa más que lo negativo en Nueva York, al tiempo de exponer que “en sentido general aquí usted puede ver cristalizado el llamado Sueño Americano. “La ciudad de Nueva York sigue siendo “La capital del mundo”. Se revela que en el 2015 recibió a más de 55 millones de turistas; es una de las metrópolis donde la diversión es permanente.

Y es que en la también bautizada como La capital del comercio, la gente puede encontrar lo que busca. Ya que, como se ha proclamado, “aquí encontramos todas las posibilidades para triunfar”.

Asimismo, aquí, si usted viene de vacaciones -o de negocio- se le permite una buena preparación del viaje y también tiene la oportunidad de conseguir una guía de la ciudad que le ayuden a disfrutar de una estancia formidable.
Pero, ¿es cierto que ya no hay ningún peligro?

Hay consenso entre los observadores del comportamiento humano en el sentido de que Nueva York, desde hace más de 15 años, ya no es peligrosa. Es decir, es una ciudad segura donde la delincuencia “no tiene cabida”.

En las décadas de los 70 y 80, Nueva York era la puerta del tráfico de drogas. Y a cada minuto se registraban asesinatos en los que participan, en un por ciento considerable, ciudadanos hispanos, entre ellos muchos dominicanos.

La información general dice que Rudolph Giuliani, en su función de alcalde, le puso fin a la delincuencia y al tráfico de drogas narcóticas. Giuliani todavía celebra el haber sido el principal protagonistas sobre la sanación de Nueva York, especialmente del Alto Manhattan donde realizaban sus fechorías delincuentes de todas las calañas.

Tras aquellos tiempos aciagos, y altamente negativos, en los últimos años esta ciudad se ha convertido -por méritos propios- en la capital económica y cultural más importante del mundo.

Y se repite el siguiente concepto: La ciudad de Nueva York, con sus cinco condados ( Manhattan, Queens, Bronx, Brooklyn y Staten Islan), sus históricos museos, así como diversos centros culturales y de diversión, ofrece un ambiente sano y un estilo de vida único que nadie podría describir sin antes vivirlo.

Como lo narra el popular diario digital portal newyorkino IMPULSO.COM: “ Asistir a un musical en Broadway, pasar una noche en Times Square, recorrer de un lado a otro el Puente de Brooklyn, disfrutar de una tarde de compras en la Quinta Avenida o sentirte como un broker en Wall Street, son algunas de las cosas que sólo se pueden hacer en Nueva York”.

Efectivamente, lo informado constituye una verdad más grande que el cielo.
Cuando ocurrieron los actos terroristas del 11 de septiembre del 2001, con el derribo de tres aviones que ocasionaron la muerte de más de 3,000 personas, parecía que Nueva York se esfumaba.

Aquellos terribles acontecimientos dejaron casi inerte a Nueva York… y la gente se había aislado de los centros de diversión al tiempo que su economía colapsaba. No obstante, a casi 15 años de aquella barbarie, La capital del mundo está completamente renovada y con su turismo en la cima.

Según informes dados a conocer por gerencias de hoteles, efectivamente, durante los últimos años el número de turistas llegados a esta ciudad se ha incrementado de manera sorprendente.

El turismo no para de crecer

¿Cuál otra ciudad del mundo alcanza tener más visitantes (turistas) que Nueva York?, preguntan observadores viajeros..

Del 2012 a esta fecha, vale señalar tras el paso del huracán Sandy -se lee en un trabajo del Diario LaPrensa-, “Nueva York cerró un año 2012 excelente en materia de Turismo”.

La opinión se recogió en la gestión del alcalde Michael Bloomberg, quien también indicó que “nuevamente la ciudad rompió récord en cantidad de turistas recibidos”. Se afirma que más de 52 millones de turistas pasaron por Nueva York durante el 2012 lo que marcó un crecimiento de más del 2% en relación al 2011, y arrojando aproximadamente 55,300 millones de dólares en impacto económico para la ciudad.

El mismo reporte precisa que las cifras indicaron que durante ese periodo, 356,000 empleos fueron generados gracias al turismo que de nuevo le levantó el pulgar a La Gran Manzana.

Nueva York tiene, asimismo, un elemento “muy especial”. Y es que es la ciudad más turística de Estados Unidos en razón, dicen los expertos turísticos, de que la mayor parte de quienes la visitan son estadounidenses, pero sin dejar de reconocer que el crecimiento del turismo internacional ha permitido alcanzar el récord que incluye a más de 11 millones de turistas extranjeros, la mayoría procedente de Asia (Japón, China, Filipinas), así como de Europa y países de Latinoamérica y la región del Caribe.

El turismo sigue siendo de capital importancia para esta ciudad. Se afirma que el pasado año alcanzó unos 55 millones de turistas (entre estadounidenses y extranjeros) y se espera que esa respetable cifra aumente considerablemente para este 2016 que vive su séptimo mes.

Duelo por la muerte de Muhammad Alí

Los segundos transcurren, también los minutos, las horas. Y la ciudad de Nueva York no para de llorar la muerte de Muhammad Alí… está, literalmente, ¡en un duelo permanente! Alí, considerado como el mejor boxeador de los pesos completos en toda la historia del boxeo, falleció el pasado tres del cursante mes tras ser duramente atacado –desde 1984- por el mal de Parkinson.

Calificado también como El Atleta del siglo XX, este ícono del deporte mundial, es todavía llorado por gente de todos los estratos sociales de esta gran urbe de Estados Unidos.

Prácticamente todas las emisoras de radio (en inglés y español), así como programas deportivos de televisión y los diarios digitales -al igual que los periódicos impresos- no dejan de informar sobre Alí.

Las populares cadenas de la televisión hispana (Univisión, con su canal 41, y Telemundo, canal 47), en sus secciones deportivas todos estos días han realizado trabajos especiales sobre el carismático púgil nacido un 17 de enero de 1942 en el poblado de Louisville, Scottsdale del estado de Arizona. “Alí vive… no ha muerto. Su legado está presente y todos debemos mantenerlo como un inmortal del deporte mundial”, opinó este periodista en su columna de elCaribe apenas unas horas después de su sentida muerte.

El entonces joven púgil, de nombre de pila Cassius Marcellus Clay, comenzó a dejar ver sus dotes de sensacional atleta cuando en los Juegos Olímpicos de 1960, montados en Roma, ganó la medalla de oro en la división de los semicompletos. La ganancia de esa presea, en representación del equipo de boxeo de Estados Unidos, constituyó un singular logro para el deporte de la poderosa nación del Norte.

Nueva York, que también es una ciudad de gran tradición deportiva, quedó impactada por la ida de uno de los seres humanos más queridos y venerados del plantea Tierra.

Sus habitantes quedaron enmudecidos por la desaparición física de Alí quien más de la mitad de sus 61 peleas en el boxeo rentable las realizó en La Gran Manzana.

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