Los anuncios que hizo por años la Dirección General de Catastro Nacional (DGCN), de que se trabaja para determinar a cuánto ascienden los bienes inmobiliarios que posee el Estado dominicano y dónde están ubicados, no han logrado traducirse en frutos concretos.
No es una simple información lo que se obtendría con un levantamiento de esa naturaleza. El Estado podría ver a través de ese estudio cuál es su valor real y cuál es su capacidad de endeudamiento, que hasta ahora no se conoce.
Hace cinco años, el entonces director general de Catastro, Bolívar Marte, informaba con “bombos y platillos” que esa institución tenía listo un “ambicioso” proyecto que implicaría entre 80 y 85 millones de dólares y quizás cinco o seis años de ejecución, con el fin de crear un mapa cartográfico del país, algo así como un levantamiento general. El país se ha quedado esperando resultados y pocas veces se ha tratado el tema, al menos en los medios de comunicación.
Bolívar Marte no es director de Catastro desde que en 2014 el presidente Danilo Medina lo destituyó del cargo, colocando en su lugar a Claudio Peña, que tiene ahora las riendas de la institución.
El levantamiento o inventario inmobiliario para la parte pública del país se había asumido como “un asunto de Estado”, dijo varias veces a elCaribe el anterior incumbente de la DGCN, dejando claro que al tema se le daría seguimiento. Las informaciones ofrecidas daban cuenta de que el desembolso de los recursos no tendría que ser automático total, porque el proyecto iría por áreas.
Lo que viene de Catastro
Sin embargo, el director técnico de la DGCN, José Alberto Ruiz Fermín, aseguró a elCaribe que el proyecto está parado porque el presidente de la República no lo ve como algo prioritario en estos momentos y porque además requiere de una gran inversión. Según Ruiz Fermín, se trata de US$32 millones, contrario a los 80 u 85 millones que había dicho antes Bolívar Marte.
“El proyecto está previsto que se realice con un financiamiento internacional. Yo diría que el desconocimiento de las autoridades, en cuanto a la importancia del Catastro, implica que no se haga la inversión, pero esa inversión es prioritaria y es necesaria para el país”, dijo Ruiz Fermín.
Sostuvo que como consecuencia de que el Estado dominicano no tiene un inventario nacional, el proyecto de titulación no ha rendido sus frutos. Implica que el Estado dominicano no conozca sus riquezas y que no sepamos cuántas personas están tituladas y cuántas no están tituladas. Explicó que aunque los 32 millones de dólares se vean como una gran inversión, eso es insignificante, especialmente cuando se conocen experiencias de otras naciones que ya realizaron el levantamiento general. “Corea tiene registrados todos los inmuebles, que son alrededor de ocho millones de parcelas en todo su territorio, que duplica el área de República Dominicana. Nosotros somos 48 mil kilómetros cuadrados y Corea del Sur tiene 96 mil kilómetros cuadrados y a pesar de eso tienen un registro tan eficaz, que una persona va a buscar cualquier documento y en cinco o seis minutos lo tiene en la mano.
Aseguró que la política del director general de Catastro Nacional está basada en un diseño de una agilización de la documentación requerida para ellos. “O sea, se están gestionando los recursos que podrían darnos una plataforma robusta, para cuando un usuario necesite un servicio, eso pueda ser minimizado en el tiempo. “Lamentablemente los recursos no nos llegan y por eso no podemos darle una respuesta a la ciudadanía”, dice Ruiz Fermín.
La cartografía es un elemento de desarrollo de un país y de funcionalidad. Pese a eso aquí no están cuantificadas las personas que poseen títulos, ni se sabe la cantidad exacta de tierras que tienen títulos. Hasta hace años la cartografía más reciente que había para el Distrito Nacional era de 1999, con un levantamiento de apenas 150 mil unidades.
Conocedores del tema, consultados por este diario, concluyen en que “debido a la falta de adecuación que existe en materia catastral, por concepto de la parte inmobiliaria, los recaudos de la Dirección General de Impuestos Internos son más bajos de lo que fueran si se contara con la información completa. Una vez realizado el mapa cartográfico se podrá saber, por ejemplo, cuánto cuesta el Palacio Nacional, cuántos cuarteles tiene el Ejército de República Dominicana, la Policía, la Armada Dominicana (antigua Marina de Guerra) o cuánto valen, las policlínicas del Ministerio de Salud Pública o sus terrenos, entre otros datos, de los cuales no se tiene certeza.
Lo que sí está haciendo actualmente la DGCN es una revisión de los índices de precios de los valores de terrenos que conforman las ciudades Puerto Plata, Valverde, Santiago, Moca, La Vega y Monseñor Nouel”.
