El Gobierno dominicano decretó que este miércoles será día de duelo nacional por el fallecimiento en la madrugada del martes de Claudio Caamaño Grullón, combatiente destacado de la Revolución de Abril de 1965 y de la expedición guerrillera de Playa Caracoles en 1973 contra el gobierno de Joaquín Balaguer.Los familiares del fenecido revolucionario expresaron un gran dolor por la partida de Claudio Caamaño, quien murió a los 78 años de edad, luego de estar ingresado en la unidad de cuidados intensivos del Centro Médico UCE del Distrito Nacional, a causa de complicaciones sufridas durante un accidente de tránsito el domingo en la localidad de Pizarrete, en Baní.
Mediante un comunicado, la familia Caamaño agradeció las grandes muestras de solidaridad que han recibido desde diferentes sectores de la sociedad dominicana y anunciaron que los restos de Caamaño Grullón serán expuestos hoy miércoles 23 de marzo desde las nueve de la mañana en la capilla La Paz de la funeraria Blandino, de la avenida Abraham Lincoln. El entierro será el jueves 24 en el Cementerio Nacional de la avenida Máximo Gómez, a las cinco de la tarde.
Expresan pesar en las redes sociales
En tanto que varios políticos y funcionarios públicos utilizaron la red social Twitter para expresar su pesar por la muerte de Caamaño y extender su solidaridad a la familia. Al enterarse del deceso del excombatiente de la revolución de abril, el expresidente Leonel Fernández publicó un mensaje en el que expresó lo siguiente: “Lamento mucho la muerte de Claudio Caamaño, combatiente constitucionalista que desde muy joven luchó por la democracia en nuestro país. Con la partida de Claudio Caamaño, el país pierde a un ciudadano comprometido con su patria. Mi sentido pésame a sus familiares y allegados”.
También el rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), academia en la que estudió Claudio Caamaño, lamentó su muerte. El rector Iván Grullón describió a Caamaño como “un hombre de mil batallas, que representa a una generación que ayudó a construir lo que es hoy la UASD, y se marcha de la vida terrenal de manera inesperada y trágica”. Agregó que la vida de Caamaño constituye un ejemplo de apego a principios, que llevó consigo durante su vida militar, durante la Gesta de Abril de 1965, también en el exilio y en la guerrilla.
Otro que también lamentó la muerte de Caamaño fue el senador Julio César Valentín al decir que “se nos fue un gran ser humano, admirado por sus luchas a favor de la Patria. En paz descanse”.
Le negaron atención en varios hospitales
Claudio Caamaño Vélez, hijo del fenecido exguerrillero, atribuyó la muerte de su padre a que no recibió las atenciones médicas a tiempo y denunció en las redes sociales que tras el accidente, ocurrido a las 5:00 de la tarde, recorrieron varios centros de salud antes de que le dieran los primeros auxilios y que a las 10:00 de la noche aún no lo había visto un cirujano. “Tuvimos que ir con mi padre en ambulancia a cuatro centros de salud. Unos sin cupo, otros sin médicos. Así estamos”, escribió.
Luego de las declaraciones del hijo de Caamaño, la dirección del Cedimat emitió un comunicado en el que expresaron que a su llegada al lugar, el señor Caamaño fue evaluado por ellos y que lo refirieron a otra clínica “en condiciones estables”. Justificaron que no lo recibieron como paciente porque no tenían disponibilidad de camas.
Un revolucionario de toda la vida
Nacimiento. Claudio Antonio Caamaño Grullón nació el 21 de febrero de 1938, en Santo Domingo.
Sin lugar fijo. Como hijo de militar, estudió primaria y secundaria en casi todos los pueblos del país a los que su padre fue trasladado. Siendo estudiante de Ingeniería Civil en la Universidad de Santo Domingo, en 1957 fue hecho preso, con prisión domiciliaria en la finca de su abuelo, en La Majagua, Sánchez, donde permaneció hasta la muerte del tirano Rafael L. Trujillo.
Sus grandes compañeros. Luchó y fue amigo de grandes hombres como Francisco Alberto Caamaño (su primo), Hamlet Hermann, Lalané José y otros, de quienes decía eran las personas más patrióticas de su generación.
