SAN CRISTÓBAL. Residentes de la comunidad Semana Santa, en esta provincia, pidieron ayer al Ministerio de Obras Públicas terminar el arreglo de la carretera que une a esa localidad con la zona donde está ubicada la presa de Valdesia.
Indignados por la desatención gubernamental, desde tempranas horas de la mañana de ayer, vecinos de varias comunidades quemaron neumáticos y lanzaron piedras, troncos de árboles y otros objetos a la calle maltrecha que exigen sea arreglada de inmediato por las autoridades de Obras Públicas.
Los habitantes del Copey, Mana y El Corte explican que cuando llueve los padres de familia optan por no enviar sus hijos a la escuela, debido a que la descalabrada calle se encharca de tal forma que impide el paso hasta de los adultos que transitan por ella. “Estamos cansados de pedir el arreglo de esta calle y nadie nos hace caso”, lamenta Martín de los Santos, residente en el Copey.
De no haber llegado a un acuerdo con los agentes policiales que intentaban apaciguar los ánimos, los convocantes de esta protesta tenían intenciones de permanecer en vigilia hasta no establecer contacto con algún emisario del gobierno. La calle que reclaman estas personas es la que conduce a Valdesia, cuyo embalse envía a la capital 6.3 metros cúbicos de agua potable y sirve para regar unas 193 mil 734 tareas de uso agrícola.
El proyecto de construcción de esta carretera fue dividido en dos etapas: Yaguate-Semana Santa y Semana Santa-Valdesia. La primera fase tiene una longitud de 8 kilómetros y ya está terminada. Solo falta la segunda etapa, que son siete kilómetros y es la que en estos moradores exigen sea terminada, por la importancia que igualmente reviste para los campesinos que transportan sus productos por esa vía.
“Nosotros le pedimos al secretario de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, quien conoce perfectamente esta carretera, que le de terminación, porque el gobierno dijo que todas las obras que estaban por la mitad les iba a dar terminación”, solicitó Efraín Montero, residente en la localidad de Mana.
Tan dispuestos están a lograr el arreglo de las calles, que hasta las amas dé casas decidieron dejar sus quehaceres para pedir a todo pulmón la terminación de esa obra. Y no solo lograron paralizar el tránsito por varias horas. Las clases también fueron suspendidas y algunos comerciantes decidieron unirse a lo que entienden un reclamo justo y necesario.
Agua se contamina por rotura
En Semana Santa también están pidiendo a los directivos de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Santo Domingo (CAASD) que resuelvan definitivamente la ruptura del sistema de tuberías que transporta el agua hasta la capital, específicamente en la zona de Boca de Mana. Los tubos en cuestión pasan sobre el arroyo Mana, lo que provoca que por la ruptura que presentan el agua consumida por los capitaleños se mezcle con el líquido mugriento de ese afluente.
