El dengue, otra vez

El dengue sigue siendo causa de muerte, más este año que el pasado. Y no discrimina. No hace tres años el Vicepresidente de la época fue víctima de la enfermedad, sin consecuencias graves. Y este año, un médico de Santiago falleció a causa…

El dengue sigue siendo causa de muerte, más este año que el pasado. Y no discrimina. No hace tres años el Vicepresidente de la época fue víctima de la enfermedad, sin consecuencias graves. Y este año, un médico de Santiago falleció a causa de la versión hemorrágica. El Aedes aegypti no discrimina, pero ataca principalmente a los más vulnerables.

En lo que va de año han fallecido 96 dominicanos por causa del dengue. La mayoría de las víctimas son pequeñines que no tienen la oportunidad ni los medios para defenderse, o que no fueron atendidos adecuadamente.

Si decimos que una enfermedad  causada por un mosquito que es parte de nuestra cotidianidad no debía provocar tantas muertes, o por lo menos, que su cadena de transmisión no sea tan larga, cualquier funcionario de Salud Pública podría responder que ese es un problema de los países tropicales y subtropicales y que sólo en América se producen cada año más de dos millones de casos.

Eso no quiere decir que la enfermedad no tenga remedio. Políticas preventivas con un mal conocido podrían impedir que cada año manejemos cifras trágicas como las que acabamos de ver. Nadie debería morir por la picadura de un Aedes aegypti, un vulgar mosquito.

Salud Pública podría decir que aunque el protocolo para manejar el mal está a la mano de clínicas y hospitales públicos, los casos no  son fáciles de identificar porque los médicos suelen confundirlos con la gripe común, lo que entraña una contradicción inexplicable, porque si se sometieran a la norma siempre obtendrían un diagnóstico preciso.

Es usual que pacientes vayan a las clínicas u hospitales con síntomas similares al dengue y terminen en sus viviendas porque “no les encontraron nada”. Y eso no debía ser.

Y es que el Ministerio no termina de comprender que su misión principal es la salud colectiva. Que debe concentrarse en la prevención, y especialmente con enfermedades de fácil propagación, endémicas, con  las que se debe trabajar todo el tiempo, con el pueblo y los propios médicos.

¿Qué hacer para no tener cada año estos lugares comunes?

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