Illinois, EE.UU. Derrick Rose, el estelar base de los Bulls de Chicago, aún no está seguro de cuándo volverá a jugar después de su lesión de rodilla.
El armador, Jugador Más Valioso de la NBA en la temporada de 2010-11, dijo que aún siente algún dolor muscular en la rodilla izquierda, reparada con una cirugía, pero no ha experimentado ningún traspié en su recuperación.
Agregó que no se ha puesto una fecha límite para su regreso. “Podría ser mañana y siento como si pudiera jugar el próximo partido. Nadie lo sabe excepto Dios”.
Rose habló ayer durante una ronda de calentamiento antes del partido en que Chicago recibirá a Portland.
El base no juega desde que se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda durante el primer partido de la serie de postemporada contra Filadelfia el año pasado, una lesión que significó para los favoritos Bulls una tempranera salida en la primera ronda de playoffs. Rose ha trabajado en mejor su disparo de media distancia.
