Margarita Cedeño dejó de ser para muchos la filántropa, desde que se lanzó al ruedo político en busca de la vicepresidencia de la República. Antes, todo era aplausos y rosas para la joven primera dama de la República.
Sin embargo, al haberse lanzado al proselitismo político las cosas han comenzado a variar. Muchos ven que hay que tirarle y comenzaron a tirarle.
Usaron una especie de kamikaze para atribuirle decenas de millones de euros en un banco europeo. La noticia propalada fue negada incluso por el propio banco danés. De ahí que el presidente Leonel Fernández le tirara un beso durante el acto en la Asamblea Nacional y fuera aplaudida por los presentes.
