El traslado a República Dominicana del avión robado el pasado domingo del aeropuerto El Higüero-Joaquín Balaguer y encontrado ayer en una zona selvática del estado de Apure, en Venezuela, implica que Caracas apruebe una solicitud de liberación de la aeronave que debe tramitar Estados Unidos, ya que el Beechcraft King Air 200 es de matrícula estadounidense.
De acuerdo con lo explicado a El Caribe por el vocero del Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC), Héctor Olivo, la tramitación del traslado de la aeronave implica la triangulación Estados Unidos-Venezuela-República Dominicana, pues aunque la propiedad del avión es detentada en el país por el Grupo Punta Cana, la matrícula N-871C está a nombre de la empresa norteamericana CAE-LTD.
En una nota, el IDAC expresó su alegría por el hallazgo de la nave y anunció que por vía de Adonaida Medina, embajadora dominicana en Venezuela, intercede ante el Instituto Nacional de Aviación Civil de Venezuela para el traslado del avión al país.
Antes de partir de gira por Miami y algunos países sudamericanos, el presidente Leonel Fernández calificó ayer de “buena noticia” el hallazgo del avión por parte de las autoridades de Venezuela. Ya antes había designado al ministro de las Fuerzas Armadas, teniente general Joaquín Virgilio Pérez Féliz, gestionar ante las autoridades venezolanas el traslado de la nave.
Varios blogs venezolanos, sobre todo del estado de Apure, destacaban el hallazgo de la aeronave por parte de funcionarios del Comando Estratégico de Defensa Integral de los Llanos y la Oficina Nacional Antidrogas en el sector Las Matas, a 87 kilómetros al este de Elorza en esa nación.
De acuerdo con los blogs, las autoridades militares venezolanas revisan minuciosamente el avión, que está en buen estado, y es corrida la voz de que pudo haber transportado una gran cantidad de drogas o algún otro cargamento.
En este país, tanto el ministro de las Fuerzas Armadas como el jefe del Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (CESA), general Senón Padilla Alcántara, observaron que las investigaciones en torno al robo del avión continúan y que, incluso, seguirán profundizándose.
La aeronave valorada en 2.5 millones de dólares fue sustraída la madrugada del pasado domingo, y de acuerdo con las autoridades con relación al caso hay más de 19 personas interrogadas, entre ellas el teniente del Ejército John Pércival Matos, hijo del general retirado Rafael Pércibal Peña. Al teniente la noche del miércoles se le dictó tres meses de prisión preventiva a cumplir a partir de ayer en la cárcel de Najayo-Hombres, en San Cristóbal. Es acusado de complicidad a cambio de US$350 mil. Entre los interrogados hay un capitán piloto del Ejército, así como civiles y militares miembros del CESA. El avión del Grupo Punta Cana no es el único robado del aeropuerto Joaquín Balaguer, pues el 7 de marzo de 2010 se llevaron a Puerto Príncipe una aeronave Cessna.
