La frustración y el sabor amargo del deporte tocaron las puertas y penetraron la mente de Yuderquis Contreras en Londres.La situación se produjo después de aquella indeseada actuación cuando falló tres veces en alzar 94 kilogramos (14 de agosto) en los Juegos Olímpicos de Londres, un peso que ella domina a su antojo, pero no ese día. El sabor amargo varió por Félix Sánchez. “He llorado mucho”, dijo Contreras luego de retornar al país. “Es que eso duele. Las marcas que estaba haciendo eran incluso para medalla de plata, y si me iba algo mal podía pelear el bronce”, señaló la pesista.
Su ánimo cambió el 6 de agosto. Ese día, Félix Sánchez se colocó en el lugar más prestigioso del podio.
“Comencé a coger un poco de ánimo cuando Félix Sánchez ganó el oro”, dijo Contreras. “Ganó por última vez en el 2004 y tuvo que esperar ocho años para hacerlo de nuevo”, apuntó.
El heroísmo de Sánchez cambió la visión de Contreras. “Uno lo veía y una pensaba que no iba a llegar más y eso como que me ha ayudado a coger un poco de ánimo. En las últimas competencias él se caía, o surgía un problema, nunca se retiró y se mantuvo al máximo. Eso me hizo cambiar”.
