BARAHONA. Al ritmo de la salsa “Nadie es eterno en el mundo”, del cantante Tito Rojas, fueron sepultados en el cementerio municipal de esta ciudad los restos de Danny Féliz (Danny Sacrificio), de 36 años, y Elizardo Miguel Medina Matos (Migui-Migui), de 35, muertos a balazos este domingo en la madrugada por el comerciante Juan Antonio Morillo Amador.
Amador dijo que lo hizo porque intentaron asaltar un negocio de su propiedad, ubicado en el sector Pueblo Nuevo, en la parte baja de la población.
Una multitud de personas, entre familiares, vecinos y personas particulares, acompañaron el cortejo fúnebre que recorrió varias calles de esta ciudad encabezado por varios vehículos, entre estos una Disco Móvil provista de un potente aparato de música que durante todo el trayecto tocó la referida canción.
Hoy en la mañana familiares de los occisos dijeron, a través de un programa interactivo de una emisora local, que sus parientes fueron asesinados y que en ningún momento hubo intento de atraco contra el victimario.
Causó alarma anoche entre los residentes en el sector Baitoita la agresión a tiros de que fue objeto por parte de desconocidos que se desplazaban en una motocicleta, la residencia del comerciante que los mató.
En la vivienda número 71 de la calle Candelario de la Rosa, que fue impactada en la puerta principal y las persianas, no había nadie, ya que los familiares del comerciante la abandonaron horas después de que este matara a los dos individuos.