Santiago. Aprovechar las oportunidades que ofrece el mercado de Haití, mejorar la capacidad de producir y exportar, para crear empleos y reducir la pobreza en el Cibao, deben ser los desafíos para la competitividad.Estas propuestas fueron presentadas por cinco empresarios de Santiago durante el panel: “Cibao en perspectiva presente y futuro”, auspiciado por la Asociación de Industrias de la Región Norte (Airen).
Hendrick Kelner, en nombre del sector del tabaco y cigarros; Félix M. García C., de la industria; Fernando Capellán de zona franca; Manuel Estrella en la construcción, y Leonis Fernández, en el agropecuario, hablaron de las trabas que enfrenta la industria para poder exportar y competir en los mercados internacionales.
Como moderador estuvo Rafael Emilio Yunén, quien aprovechó para mostrar el cuadro de aumento de la pobreza en la región, mientras el obispo auxiliar, Valentín Reynoso, tuvo a su cargo la bendición de la actividad.
En el panel de tres preguntas para cada uno de los expositores, Félix M. García C. planteó la necesidad de trabajar en una nueva salida al mar, con la operación del muelle de Manzanillo, ante el deterioro que presenta el de Puerto Plata.
Calificó como perjudicial el actual esquema de transporte terrestre para el sector empresarial, por lo que se requiere redefinir esa situación.
Planteamientos
Además, propuso que en vez de ver a Haití como un problema, sea visto como un desafío o una oportunidad. García C. entiende que una forma de lograr la competitividad y exportar es a través de la producción con calidad, con servicio y precio.
Para Manuel Estrella, enfrentar los desafíos requiere capacidad de diagnóstico y dijo que a pesar de los problemas deben trabajar en consensuar las necesidades de la región para obtener su desarrollo.
Manifestó que una de las ventajas es que Santiago cuenta con un plan estratégico desde hace 20 años, pero entiende que se ha perdido mucho tiempo en dispersiones.
El empresario afirmó que a pesar de que en los próximos años el país tendrá costos más baratos de energía con la entrada y construcción de plantas a carbón y de gas, eso no incidirá en obtener energía más barata.
Al igual que García C., Fernando Capellán, expresidente de Adozona, llamó a aprovechar las ventajas del mercado haitiano, tanto en lo textil como en el sector construcción. Cuestionó que resulte más barato comprar en China productos para el sector textilero, que adquirirlos en territorio dominicano.
También criticó que trabas como las normas prudenciales impidan ser competitivos en el sector exportador.
En el caso de Leonis Fernández, propuso construir la presa de Amina y así aprovechar el agua que permita desarrollar el sector agropecuario de la Línea Noroeste.
Mientras Hendrick Kelner dijo que falta mucho para lograr la competitividad y muestra de ello es que el país tiene un déficit en la balanza comercial con Nicaragua y El Salvador. Entiende que República Dominicana, como sucede con el sector del cigarro de marcas, compite con calidad y no con costos. Cuestiona las instituciones que trabajan por la competitividad.
Dice el Cibao tiene más contribuyentes
Durante las palabras de bienvenida, Lina García, presidenta de la Airen, recordó que en el informe de la Dirección General de Impuestos Internos, sobre las recaudaciones durante el 2012, en la región Norte se registra el 45.3 por ciento de los contribuyentes del sector agropecuario, el 48.7 de los empleadores del sector.
También tiene el 30% de todos los empleadores, el 25.7 de los empresarios del sector industrial y el 29.7 de los empleadores del sector.
Expresó que como todo el sector productivo del país, necesitan insistir en una educación de mayor calidad, adecuación del Código Laboral, libertad de contratación del transporte terrestre, aprobación y puesta en funcionamiento del Banco de Fomento a las Exportaciones.
Igualmente, planteó el mejoramiento de las infraestructuras, pero reconoce que nada de esto podría tener éxito sin el concurso decidido del Gobierno dominicano.
“Tenemos una inigualable oportunidad de fomentar y desarrollar los encadenamientos productivos, tanto los existentes como aquellos que pueden crearse a partir de los subsectores económicos de la región”, apuntó.
