La escuela Salomé Ureña no ha iniciado docencia y el director del liceo Unión Panamericana asegura que recibió a los estudiantes porque no tenía otra opción.Apenas el año escolar 2013-2014 ha comenzado y las denuncias por la situación de planteles escolares han comenzado a llover, a pesar de que el 4% del producto interno bruto (PIB) ha sido asignado a la educación preuniversitaria a través del Ministerio de Educación de la República Dominicana (Minerd).
Ejemplo de ello es el profesor Francisco Hilario Franco, director del liceo Unión Panamericana, quien está que echa chispa: “Comenzamos el año escolar porque no quedaba de otra; la verdad es que aquí no hay condiciones para dar clases en condiciones de respeto a la dignidad de los estudiantes, el cuerpo docente y los empleados”.
Aseguró, y así mostró a elCaribe, que “el liceo está a medias”, pues de 12 baños solo dos están en condiciones y los otros 10 no tienen puertas, ni agua, ni losetas ni lavamanos. “Y dígame usted, ¿dónde los 800 estudiantes que tenemos hacen sus necesidades?” Hay áreas sin luz eléctrica y constantemente se producen cortocircuitos. El lunes 19 en la mañana un trueno cortó la energía y solo ayer se pudo reponer.
El patio es un lodazal y áreas como la oficina de la Dirección y el Registro la están reparando aún. Hay paredes sin empañetes y otras a medio empañetar.
La situación del liceo es tan deplorable que el director Hilario Franco reveló que de los fondos que asigna el Ministerio de Educación, ha tomado la iniciativa de comprar equipos para instalar un laboratorio de ciencia, que no hay.
Además de las tandas matutinas y vespertinas, el liceo es usado los fines de semana por las universidades Autónoma de Santo Domingo (UASD) y APEC, el programa de educación de adultos “Prepara”, del Ministerio de Educación, una escuela de locución y una iglesia protestante.
De acuerdo con Hilario Franco, esas instituciones usan las instalaciones del liceo por disposición del Ministerio de Educación, pero no aportan un solo centavo y mucho menos reparan los daños que hacen.
Ante la situación, asegura que el Unión Panamericana realmente no está en condiciones de haber iniciado el año escolar, pero que no le quedó otro camino que recibir a los estudiantes “y hacerle un acto de bienvenida en un patio lleno de caliche y tierra”.
“Y encima de eso querían que yo iniciara este año la tanda extendida, sin haber condiciones, sin haber cocina ni comedor, nada, y le dije que no, que el proyecto es muy bonito pero que en este liceo no hay posibilidad de iniciar la tanda extendida”.
Hilario Franco dijo que ha buscado explicación con la ingeniera a cargo de las reparaciones, pero ésta se escuda en la excusa de que no le han pagado las cubicaciones.
Escuela no inicia docencia
El año escolar inició el pasado lunes, pero los niños de la escuela Salomé Ureña, del populoso sector Capotillo, en la parte alta de la ciudad capital, no han podido comenzar a recibir clases, esto debido al deterioro que presenta este plantel.
Aulas sin techo, grandes cúmulos de basura, butacas unas arriba de las otras, paredes faltas de pintura y sucias, son imágenes que describen a este centro educativo.
Por eso ayer, con sus uniformes impecablemente limpios, los estudiantes clamaban con consignas que se arregle su escuela o que se les reubique en un lugar mejor. Y en la escuela no había ninguna autoridad, ni la directora ni los profesores. Y en Capotillo culpan al Minerd por el retraso en el inicio de la docencia.
Según el dirigente comunitario Danilo de la Cruz, el lugar no ésta estructuralmente diseñado para tener una escuela, debido a que antes era una casa, por lo que entiende que la Salomé Ureña está en estado de emergencia.
Explicó que han agotado todos los medios pacíficos para que el Gobierno cumpla con la promesa de hacer las dos escuelas que necesita ese popular sector capitalino, pero al parecer no le hacen caso.
Protestan por deterioro escuela sector Capotillo
Los estudiantes y dirigentes comunitarios del sector Capotillo dijeron que esperarán hasta mañana jueves para que reubiquen a los más de 200 alumnos de la escuela, y si no reciben respuestas se incrementarán las protestas, cerrarán las calles del sector para impartir clases en ellas. Además, dan un plazo de un mes para que el Ministerio de Educación busque dónde serán construidas las escuelas que prometieron en la campaña electoral.
