El sistema turístico mundial crece de manera estable entre 4 y 4.1% anualmente.Mientras, los nichos de mercado que buscan el turismo experiencial van asumiendo cada día una cuota de mercado más amplia en relación al turismo tradicional, llegando a acumular un 25% del mercado total en los próximos años.
“El turista de hoy es uno educado y bien informado. Son más numerosos los turistas con sensibilidad ambiental y social que buscan destinos bien planificados y menos contaminados, y que dejan a un lado los destinos mal diseñados con problemas ambientales o sociales” manifiesta Carla Campos, ejecutiva del Consorcio Dominicano de Competitividad Turística (CDCT).
El Consorcio desde hace más de una década trabaja en la promoción de una oferta en turismo sostenible a través de acciones que viene realizando con 10 clúster turísticos que operan en los principales destinos del país: Barahona, Pedernales, Puerto Plata, Jarabacoa, Constanza, La Romana, La Altagracia, Samaná, Montecristi y Santo Domingo.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de Turismo, el mercado sol y playa ha madurado y su crecimiento, contabilizado por visitas internacionales, se espera se mantenga plano.
Asimismo, se evidencia que el modelo tradicional tiene la capacidad de retornar a la economía local hasta un 20% de los ingresos generados por la actividad turística, a diferencia de hasta un 95% que el ecoturismo tiene la capacidad de retornar. Otro elemento importante dentro de este tipo de oferta es el promedio de gasto diario de un turista. El 26% de los turistas que se definen a si mismo como “ecoturistas” están dispuestos a gastar entre 1,000-1,500 dólares por viaje, superior al promedio de gasto diario del turista que se hospeda en hoteles todo incluido.
Una gran parte del dinero de los paquetes todo incluido llega a las aerolíneas, los hoteles y otras compañías internacionales.