Casi todos los políticos del patio son creyentes, esotéricos, y hasta acuden a santerías, pero lo hacen discretamente, siempre por temor al qué dirán.
Talvez por eso, en uno de los actos políticos recientes en que un grupo de reformistas, más bien balagueristas auténticos como prefieren ser identificados, ofreció su respaldo a la candidatura presidencial de Danilo Medina, muchos se veían entre sí con picardía cuando repicaron tambores y salió a escena un grupo bailando atabales, es decir, música de esa afroantillana, ligada con los espíritus.
Los que conocen a los organizadores del acto saben que gustan de apelar a los espíritus y al más allá de vez en cuando y no se sorprendieron, pero muchos invitados se pusieron medio chivos.
Hasta el Titán de Bronce se sorprendió, según le confió más tarde a algunos de sus cercanos colaboradores. Pero de que le gustó la iniciativa, no quedó dudas, por las sonrisas de oreja a oreja del candidato y de los organizadores. ¡Tu tum, tu tum, tu tum…!
Interpretaciones
En el comando de campaña del presidente Hipólito Mejía hubo alegría que aún se mantiene por el triunfo de candidatos perredeístas, o afines, en la Federación de Estudiantes Dominicanos, el Colegio Médico Dominicano y el Colegio de Abogados.
Allí hay quienes interpretan los resultados de esos comicios intragremiales como “un avance de lo que viene en mayo”, y en medio de carcajadas y abrazos son reiterativos en un continuo “esos son los trailers”.
Sin embargo, en la acera de enfrente, es decir, en el comando de campaña del PLD –como es natural- no lo interpretan así y un chusco fue tan lejos escarbando que me razonó que “Ambiórix Rosario, el de la FED, es un peledeísta disgustado que podrá ser como Pedro: que volverá tan campante; la que ganó en el Colegio Médico es del sector de Miguel Vargas; y en el caso de los abogados, Pérez Vólquez, que también es del presidente del PRD, ganó por decisión de consenso de todos los grupos”. ¿Y entonces…?
