Santiago. Después de las cuatro de la tarde residentes en el distrito municipal de Pedro García se quedan sin servicio de salud, por lo que en caso de emergencia deben acudir a Santiago.Esta precariedad se atribuye a la falta de personal, por lo que residentes en la zona reclaman más nombramientos, además de que el centro de salud sea equipado para que esté en capacidad de ofrecer los servicios que demandan.
El hospital de Pedro García fue construido en la gestión de gobierno de Leonel Fernández. Uno de los munícipes manifestó que el poco personal que labora solo lo hace hasta las cuatro de la tarde, por lo que quienes se enferman a partir de esa hora tienen que ir a Santiago, situación que ha provocado que parturientas den a luz en la carretera, la que además está en muy mal estado.
Comunidad
Es por esto que piden al Ministerio de Salud Pública y al presidente Danilo Medina poner atención para mejorar las condiciones en que opera este centro de salud, por el bien de los munícipes de esta zona. La comunidad amenazó con realizar diversas manifestaciones, si el Ministerio de Salud Pública no interviene el centro asistencial. A las demandas de los residentes de Pedro García se han unido los comerciantes ubicados en el trayecto de la carretera turística Gregorio Luperón que reclaman la construcción de la vía que ellos denominan el “huacal de huevos”, debido al mal estado en que se encuentra.
Y es que fruto de esa situación muchos negocios se han ido a la quiebra ya que solo los que por obligación tienen que transitar por esta vía, lo hacen. La queja es también de los agricultores que enfrentan dificultad para transportar sus productos hacia los pueblos más cercanos. También se quejan los dueños de medios de transporte.
Mal estado de la vía los lleva a la quiebra
Desde hace más de una década la carretera turística Gregorio Luperón presenta varios puntos críticos, debido a los constantes deslizamientos de tierra. Los munícipes manifestaron que debido a las condiciones de la carretera, muchos puestos de venta de frutas, artesanía y negocios de venta de comida cerraron sus puertas por falta de compradores.
