La MLB tiene última palabra caso Manny

Así se expresó Luichy Sánchez, ejecutivo de las Águilas, ante el suspenso de si Ramírez finalmente llegaba o no al país, a pesar del impedimento que tiene el patrullero por parte de la MLB luego de que expresara su interés en vestir el uniforme del

Así se expresó Luichy Sánchez, ejecutivo de las Águilas, ante el suspenso de si Ramírez finalmente llegaba o no al país, a pesar del impedimento que tiene el patrullero por parte de la MLB luego de que expresara su interés en vestir el uniforme del representativo de Santiago de los Caballeros.

“La decisión de Manny Ramírez jugar con las Águilas Cibaeñas la tiene la Major League Baseball”, manifestó Sánchez. “Por el momento no podemos hacer absolutamente nada. La última palabra la tienen ellos (MLB)”, agregó.

Las Águilas inician hoy sus entrenamientos en el estadio Cibao y el nombre de Manny ya figuraba en el listado de jugadores que estarían en las prácticas. “No será así. Solo estamos a la espera de la decisión que pueda tomar la Major League al respecto”, manifestó Sánchez.

La semana pasada, Rob Manfred, vicepresidente ejecutivo de relaciones laborales del Béisbol de Grandes Ligas, manifestó que Manny no puede accionar en la pelota invernal debido a que el dominicano tiene una suspensión de 100 partidos luego de dar positivo a un segundo caso de uso de sustancias prohibidas para el rendimiento del cuerpo.

“El hecho de que Manny no haya venido al país, ha sido una decisión propia de él. Nosotros simplemente nos acogemos a lo manifestado la semana pasada por el presidente de la liga (doctor Leonardo Matos Berrido) en el que expresa que el jugador no tiene ningún tipo de problema en ver acción con las Águilas”, expresó el ejecutivo.

Ramírez, quien se retiró en abril del béisbol de las Grandes Ligas, solicitó el pasado viernes su reingreso con el objetivo de cumplir con la sanción impuesta por la MLB, decisión a la que le hizo saber a su agente Scott Boras.

“Estoy solicitando formalmente mi reintegración al béisbol, cumpliré la sanción que tengo pendiente y me pondré disponible para los equipos de Grandes Ligas”, dijo Ramírez a ESPNdeportes.com.

Ramírez bateó .243 con dos jonrones, 15 dobles y 28 impulsadas en tres campañas con las Águilas, entre 1991 y 1994, antes de convertirse en uno de los mejores bateadores en la historia de Grandes Ligas.

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