Es responsabilidad de todo Gobierno el destinar recursos para el desarrollo de las artes y la cultura de su país, con la finalidad de incentivar en niños y adolescentes su amor por éstas, lo que se traduce en seres humanos más sensibles y comprometidos con la nación. Ante esta premisa surge en la República Dominicana el Sistema Nacional de Escuelas Libres, un programa del Ministerio de Cultura dirigido al fomento de la creación de bandas musicales infantiles y juveniles y escuelas de artes escénicas y aplicadas en comunidades suburbanas y barriales del territorio nacional. “Dar integración al desarrollo artístico de jóvenes y niños de escasos recursos, donde hagan un uso creativo de su tiempo libre y desarrollen destrezas que les provean la oportunidad de participar en la vida social, cultural y productiva de la nación, alejándose al mismo tiempo de las drogas y la delincuencia”, es la esencia de este proyecto, nos cuenta Samanta Olivero, directora del programa desde el pasado 2013.
¿Cómo se lleva a cabo este proyecto en el día a día, cuál es su logística?
La ejecución del mismo está a cargo de la Dirección General del Sistema Nacional de Escuelas Libres, en coordinación con las direcciones regionales y provinciales de cultura, los ayuntamientos, las gobernaciones, las instituciones comunitarias y el empresariado. Para lograr una mayor participación de la población en las Escuelas Libres, las mismas son instaladas en espacios comunitarios, tales como: clubes, ayuntamientos, asociaciones y gobernaciones, escuelas y colegios. Las clases se imparten todos los días en jornadas de tres horas por disciplina, tanto en tanda vespertina como matutina.
¿Cuál entienden ustedes es su mayor aporte con este tipo de iniciativas?
El desarrollo de núcleos libres de arte y música que incentiven las relaciones interpersonales, la convivencia en comunidad y la colaboración mutua hacedora de una cultura de paz.
Los propósitos de la implementación del proyecto con carácter de permanencia son…
Dentro de ellos, prevenir el consumo de drogas y las actividades delictivas en la población infantil y juvenil, así como promover el desarrollo integral, la creatividad y los valores democráticos, como el trabajo en equipo, el respeto por la diversidad y la tolerancia. También convertir a los estudiantes capacitados en multiplicadores de lo aprendido dentro de su comunidad, ampliando los beneficios directos del mismo; generar ofertas de servicios culturales, con programas de actualización artística y fomento de las industrias culturales, y capacitar para el empleo en el área animación artística y cultural que inserte a los jóvenes a la productividad y genere nuevos flujos de ingresos a los mismos.
¿En cuántas localidades están presentes?
Actualmente sobrepasamos ya 50 comunidades, en las cuales ofrecemos clases de música, danza, teatro, artesanía y gastronomía a un blanco de público que oscila entre los 7 y 25 años de edad.
¿Cómo participan las comunidades?
La experiencia la dan los años. Y luego de analizar la trayectoria del proyecto nos dimos cuenta de que lo mejor era que los maestros se trasladaran hasta las zonas necesitadas, pues en muchos casos, niños con mucho talento no podían movilizarse hasta el lugar indicado. Por eso pensamos en que las comunidades ofrecieran el espacio físico. Las Escuelas Libres pueden estar debajo de un gran árbol de mango, en un bonito patio, en el aula de una escuela, en una junta de vecinos o en la capilla de una Iglesia. Deben facilitar también un coordinador, que es el enlace con el Ministerio. Nosotros nos encargamos del pago del maestro y de la asesoría técnica, que verdaderamente los niños estén recibiendo la formación adecuada.
¿Cuál ha sido uno de los logros más importantes?
Podría destacar la creación de la Banda Nacional de Escuelas Libres, compuesta por los estudiantes más destacados del Sistema, quienes resultaron elegidos tras un proceso de formación de residencia orquestal desarrollado por Santy Rodríguez, coordinador nacional de música del Sistema Nacional de Escuelas Libres. l
Experiencia
Sobrepasamos ya 50 comunidades, en las cuales ofrecemos clases de música, danza, teatro, artesanía y gastronomía”.
Misión
Buscamos fortalecer el primer encuentro que todo niño/joven debe tener con la cultura y las artes”.
Expansión
Tenemos en carpeta dar apertura a cinco escuelas este año. Estamos realizando las gestiones de lugar para que esto sea posible”.
