Los patronatos auxilian al Estado en labores sociales

Ante la inercia del Estado para asumir sus atribuciones de asistencia y acompañamiento a segmentos vulnerables de la población, así como para velar por el buen funcionamiento y mantenimiento de costosas obras de infraestructura pública, han ido…

Ante la inercia del Estado para asumir sus atribuciones de asistencia y acompañamiento a segmentos vulnerables de la población, así como para velar por el buen funcionamiento y mantenimiento de costosas obras de infraestructura pública, han ido conformándose en el país, distintos patronatos, por iniciativa del sector privado, que contribuyen a atender necesidades específicas de algunos colectivos y hacer que determinadas instituciones cumplan con sus fines.

Muchas de estas entidades que surgieron para contribuir puntualmente en algunas áreas, principalmente de la medicina, acabaron convertidas en centros especializados que hoy ofrecen un amplio abanico de servicios a sus usuarios.

Ejemplo de ello, es el Patronato de Lucha contra la Lepra, fundado en el año 1963, por el Doctor Huberto Bogaert Díaz, con el propósito de colaborar en la lucha contra esta temida patología cutánea, estimular el estudio de las enfermedades de la piel y venéreas en República Dominicana, y al mismo tiempo, desarrollar un programa de preventiva a través de distintos medios de comunicación.

Tres años más tarde, el Patronato, se convirtió en el Instituto Dermatológico y Cirugía de la Piel, que hoy día funciona como el principal centro especializado en esa rama de la medicina del país.

Lo mismo sucedió con el Patronato de Lucha contra la Diabetes, una institución sin fines de lucro que surgió en el año 1972, ante la desprotección de los pacientes que sufrían de esa enfermedad, por iniciativa del doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés.

Ese mismo año quedó conformado el Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (INDEN), como una dependencia del Patronato para ofrecer servicios médicos a los más necesitados que estuvieran afectados de esta alteración metabólica.

Ya en el 1983, se crea el “Hospital – Escuela para Diabéticos”, el cual cuenta con médicos diabetólogos, nutricionistas y endocrinólogos y donde se suministra los medicamentos especializados a muy bajo costo y generalmente subsidiados, y gratuitamente a los niños, adolescentes en su totalidad.Según el portal web del INDEN, este centro, es el más grande y actualizado de América Latina y el Caribe para el cuidado de los diabéticos.

Servicio y amor al prójimo

Si hay un ejemplo de trabajo y amor por el prójimo, lo constituye el Patronato Nacional de Ciegos, la única institución del país que desde hace medio siglo trabaja para la rehabilitación, reinserción y derechos de los no videntes, principalmente de aquellos de escasos recursos.

Esta institución, sin fines de lucro, fundada por el ingeniero Rafael Aguayo y Tancredo Aybar Castellanos, el 5 de noviembre de 1964, ofrece un conjunto de servicios de rehabilitación a las personas ciegas o con baja visión, para que logren la anhelada autonomía personal, integración familiar, social y laboral.

En una entrevista reciente concedida a elCaribe, su presidenta, Josefina Morfa, sostuvo que la labor del Patronato ha supuesto un gran esfuerzo, trabajo y entrega por parte de los directivos, empleados y donantes afiliados, que han apoyado la causa. “Sólo así se llega a 50 años de labor ininterrumpida, siempre ampliando los servicios a nivel nacional y superándola, abriendo más escuelas”, destaca. Cada año alrededor de 450 personas completan un ciclo formativo que les permite reescribir su historia de vida, aprendiendo a aceptar su discapacidad y a valerse por cuenta propia a través del aprendizaje de un oficio productivo.

En favor de la rehabilitación

Igual de hermosa es la labor que desarrolla la Asociación Dominicana de Rehabilitación, cuyos orígenes se remontan al año 1959, cuando la señora Mary Pérez de Marranzini junto a un grupo de hombres y mujeres gestaban la creación de la Asociación Pro-Rehabilitación de Lisiados. Ya para 1963 se presentó la más severa epidemia de poliomielitis padecida en el país, que afectó a más de 400 niños.

Ante la falta de la vacuna del Dr. Sabin, las autoridades de Salud Pública encontraron en la naciente asociación un aliado para combatir las secuelas del brote, motivando al gobierno de Donald Reid Cabral a donar los terrenos en donde hoy se encuentra la sede de la institución.

En 1965 extendieron los servicios a personas lesionadas durante la contienda bélica de ese año y tres años después, quedó inaugurado lo que hoy se conoce como el Centro de Rehabilitación.

Ante una de las enfermedades más devastadoras, como el cáncer, y la falta hasta hace dos años de un hospital público especializado para su prevención, diagnóstico y tratamiento, surgió la Liga Dominicana contra el Cáncer, función que ejerce a través del Instituto de Oncología Dr. Heriberto Pieter, desde hace más de 70 años.

En el interior del país, también existe otra entidad con esos fines, como es el Patronato Cibaeño Contra el Cáncer (PCCC) fundado en octubre de 1964, para trabajar en la promoción, sensibilización, diagnóstico y tratamiento.

Existen otras entidades para apoyar a personas con hemofilia, para la investigación y tratamiento de niños con enfermedades del sistema nervioso central, de apoyo nutricional materno infantil, entre otros servicios médicos y sociales.

Velar por la gestión y funcionamiento de obras 

También está el tipo de patronatos nombrados por el Gobierno para velar por el buen funcionamiento de obras públicas, como hospitales, cárceles, recintos feriales, como son el Hospital Plaza de la Salud, de la Ciudad Ganadera, de la Ciudad Colonial, la cárcel modelo de Najayo, entre otros. En el caso de la Plaza de la Salud y del Centro de Diagnóstico, Medicina Avanzada y Telemedicina (CEDIMAT), construidos con fondos estatales en 1995, sus patronatos fueron constituidos previo a ser inaugurados, en 1996, mediante decreto. Ambos se componen por miembros ex officio del sector oficial, profesionales de la medicina, educadores, empresarios y religiosos. Tras la celebración del Quinto Centenario, fue creado un patronato en la Ciudad Colonial para gestionar dichas obras.

450
No videntes Participan cada año del ciclo formativo concebido por el Patronato que les ayuda a insertarse en la sociedad.

Año 1959
Fundación De la Asociación Dominicana de Rehabilitación, entidad que contribuye a tratar personas con discapacidad.

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