El Presidente apoyó su pedido en la exposición de su obra de gobierno, señalando que se está haciendo “lo que nunca se había hecho”.
El presidente Danilo Medina exhortó a los jefe de Estado participantes en la XXIII Cumbre Iberoamericana celebrada en Panamá a conectar con las aspiraciones de su población, a no defraudarlos y a pensar juntos en el tipo de economía les permitiría lograr el bienestar de su gente.
Al agotar su turno en la plenaria de la cumbre, Medina llamó a los mandatarios participantes a sumar sus voluntades “a la de las grandes mayorías que necesitan de nuestra creatividad y nuestra audacia, para lograr un modelo de desarrollo más justo y solidario”.
A su juicio, se hace necesario tener voluntad política para lograr un real estado de bienestar y conectar con las aspiraciones de las grandes mayorías, ya que esos son precisamente parte de los reclamos de la población a los jefes de Estado ante la realidad actual, según él marcada por la crisis económica y problemas de pobreza, desigualdad social e inseguridad.
“Lo que una vez fuera llamado ´Estado de bienestar´, para destacar el compromiso y responsabilidad del Estado por la calidad de vida de las personas, reemerge en el imaginario público y resume las aspiraciones de millones de ciudadanos insatisfechos”, proclamó.
En ese sentido, recomendó a los gobiernos impulsar programas sociales que ayuden a sacar millones de personas de la pobreza y a mitigar la desigualdad.
Al respecto, defendió su obra de gobierno al señalar que “Estamos haciendo lo que nunca se había hecho, trabajando para fortalecer la confianza de la población y dando pasos firmes en la lucha contra la pobreza y la desigualdad.
“Nos hemos comprometido con nuestra gente a ponerlos a ellos, los ciudadanos y ciudadanas, en el centro de las políticas públicas”.
La Cumbre
La XXIII Cumbre Iberoamericana se clausuró en Panamá con un compromiso de renovación y el deseo expresado por la mayoría de afrontar un mapa de ruta que identifique las nuevas prioridades del grupo de 22 países.
Los jefes de Estado aprobaron los habituales respaldo a Argentina en su conflicto por la soberanía de las Islas Malvinas con el Reino Unido, la demanda del levantamiento del embargo estadounidense a Cuba, otro de apoyo al uso del idioma español en los foros multilaterales, y varios más sobre el masticado de coca, el derecho al agua.
La cita contó con la ausencia de la mitad de los mandatario, y entre sus conclusiones está el estudio de las reformas que permitan una modernización de las Cumbres Iberoamericanas.