La masiva demostración del domingo en respaldo a la sentencia del Tribunal Constitucional fue lo que bien podría calificarse como un pago con la misma moneda a la caterva (para usar el término utilizado por el Cardenal) de ONG y otros grupos y personas que se prestan permanentemente a hacer coro dizque en defensa de los derechos de nuestros vecinos sin desperdiciar la menor oportunidad. Podría decirse hasta que se juntaron mansos y cimarrones, porque entre los participantes en la demostración hubo figuras que es harto conocido que tienen posiciones equidistantes en el enfoque de diferentes temas. Nuevo round…
Muy alebrecado
El joven dirigente político, de la oposición para más señas, no pudo ocultar que es fan de todo corazón –intenso- de Luis Miguel en el concierto de este el pasado sábado en Altos de Chavón. Además de pasarse toda la velada tarareando las interpretaciones de El Sol de México, como la gran mayoria de los presentes, nuestro personaje se afanó y se afanó, braveando de a duro con varias adolescentes y algunas mayorcitas que pugnaron -algunas con éxito, otras no- por conseguir un autógrafo del artista. Gente que estaba en el espectáculo me reporta que ese amigo “por lo menos debe aprender a guardar la compostura”, máxime si querrá figurar como candidato a una posición electiva en los comicios venideros, porque no es que reniegue de su admiración por ese o cualquier otro artista, pero que no sea tan fervoroso. Las figuras públicas tienen que saber nadar y guardar la ropa…
Mediático
Algunos politicos, de los que forman parte de las cúpulas dirigenciales de nuestros partidos, ostentan un “liderazgo” que no es tal, que es solo de figureo en periódicos físicos y digitales e intervenciones en los espacios radiales considerados con rating y en los televisivos de entrevistas y comentarios, aunque sean de poca, reducida y escasa audiencia. Es lo que bien podrían calificar los teóricos como detentadores de un posicionamiento inorgánico en el esquema del liderazgo político. Lo grande es que muchos se lo creen …y no quieren que les digan que es ficticio el rol mimetista que tienen.