Calles del barrio 27 de Febrero son utilizadas como vías alternas por el cierre de varios tramos de la avenida Padre Castellanos.
Los residentes en el barrio 27 de Febrero, del Distrito Nacional, pidieron a la Amet más agentes en las vías alternas creadas por la construcción de la Segunda Línea del Metro.
Manuel Almánzar, dirigente comunitario, explicó que las calles afectadas son La Quince, la Catorce, Respaldo Ocho y Respaldo Diez, vías que son utilizas por más de dos mil niños de la zona para ir a tomar docencia y que corren el peligro de ser atropellados. Aclara que no están en contra de los desvío, pero demandan protección para la gente.
“Porque los vehículos no dan oportunidad para que crucen. En la calle 15 tenemos alrededor de dos mil estudiantes que cruzan a la Escuela Capilla La Altagracia y a los Colegios Los Braches y Nueva Infancia y que no tienen esa protección y en cualquier momento pueden ser estropeados”, narró Almánzar.
Otro de los problemas de movilidad que aqueja a los residentes en la referida barriada es que las aceras están ocupadas por negocios de particulares, por lo que exigen al Ayuntamiento del Distrito Nacional que desocupe esos espacios públicos.
En otro orden, los residentes en el barrio 27 de Febrero también reclamaron a la Distribuidora de Energía del Este que cambie el horario de los apagones, que generalmente son en horas de la noche, porque la oscuridad es propicia para que se produzcan asaltos.
