El obispado de La Vega y otras organizaciones se solidarizaron con los sectores que protestan contra la contaminación que produce Barrick Gold y los planes de explotar Loma de Miranda.
Junto a comisiones de la Pastoral Social-Cáritas y de Medio Ambiente, también expresaron su oposición al intento de desviar el cauce del río Yaque del Norte a su paso por Jarabacoa por considerarlo un atentado contra los recursos naturales de la zona.
A través del documento titulado “defender la naturaleza, es amar la vida”, la diócesis vegana fijó su posición en relación al tema de las explotaciones mineras presentes y futuras en su territorio. Igualmente, se solidariza con quienes solicitan que Loma Miranda sea declarada área protegida por considerarla un patrimonio natural de la población y un recurso estratégico para la preservación de la vida de todos los dominicanos.
Reflexión
La presentación tuvo lugar en el auditorio de Radio Santa María con motivo del recién celebrado Día Internacional de la Tierra. El texto recoge la múltiple problemática que afecta el medio ambiente en el territorio que abarca la diócesis vegana, compuesta por las provincias de La Vega, Monseñor Nouel, Sánchez Ramírez y Hermanas Mirabal.
Señala los factores que ponen en peligro los diferentes ecosistemas y afectan directamente la vida de muchas personas.
El acto fue presidido por el obispo de la diócesis de La Vega, monseñor Antonio Camilo, acompañado por los reverendos Robinson Mejía, encargado de Pastoral Social-Caritas.
En el documento se apela también al artículo 38 de la Constitución, que señala que “el Estado se fundamenta en el respeto a la dignidad de la persona y se organiza para la protección real y efectiva de los derechos fundamentales que le son inherentes”. l miguel ponce
Sumar esfuerzo en favor de los recursos naturales
Los grupos religiosos y sociales llamaron al pueblo cristiano de la diócesis de La Vega, a las organizaciones de la sociedad civil e instituciones de servicio, a otras denominaciones religiosas y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad a respaldar e integrarse de manera firme a las acciones que estarán desarrollándose para proteger los recursos naturales.
