Santiago. El presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano, monseñor Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, propuso trabajar urgentemente en la prevención para frenar los crecientes actos de criminalidad, violencia y delincuencia.Reconoció que las autoridades han estado trabajando en ese aspecto, aunque lamenta que muchas veces se ataque el mal después que aparece. El obispo de Higüey entiende que cuando existe prevención de los delitos por parte de las autoridades del Gobierno, como son los organismos militares y policiales, la delincuencia no tiene presencia en la población.
“Si se logra articular programas y actividades de formación con la juventud a través de las escuelas, los clubes, la familia y la sociedad civil en sentido general, evitaremos que estos males sociales continúen sucediendo”, apuntó al participar de la celebración del décimo aniversario de ordenación de monseñor Julio César Corniel Amaro como obispo de Puerto Plata.
El religioso indicó que la única manera que se pueden prevenir los actos vandálicos, delincuenciales y de violencia en la República Dominicana, radica en que se tiene que trabajar de a duro en la prevención de los delitos. Con relación al proceso judicial que se le sigue en el Vaticano al ex Nuncio Apostólico, Jozef Wesolowski acusado de pederastia, Nicanor Peña dijo que ese caso es exclusivo del Derecho Canónico y que hasta que no culmine por prudencia no se debe opinar al respecto.
Sobre las manifestaciones de protestas acontecidas la semana pasada en Higüey, llamó a las autoridades a atender los múltiples problemas que afectan a ese pueblo. Refiere que a pesar de ser una zona turística lamentablemente no tiene ni un acueducto para los ciudadanos abastecerse de agua potable.
La voz del religioso se une a la de otros sectores que desde distintos escenarios han reclamado de las autoridades competentes, acciones para detener los hechos de violencia y la criminalidad que afecta al país y cuyos protagonistas son mayormente jóvenes.
