GINEBRA— El número de muertos después de seis meses de una revuelta popular en Siria llegó al menos a 2.600, dijo el lunes la máxima autoridad de Naciones Unidas en asuntos de derechos humanos.
Navi Pillay, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, dijo que la cifra se basa en «fuentes confiables en el lugar».
Pillay dio la cifra el lunes durante el inicio de una reunión de tres semanas del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, Suiza.
El mes pasado, el Consejo sostuvo una reunión urgente en Siria y en ella se tomó la resolución —por una abrumadora mayoría de votos— de exigir que Siria ponga fin a su sangrienta ofensiva en contra de manifestantes opositores al gobierno sirio.
