¿Deberían percibir dinero los atletas del deporte universitario de los Estados Unidos? Esa es una de las preguntas más persistentes en ese país.A la fecha no hay una respuesta definitiva, pero se mantiene en estudio. El entrenador de la North Carolina A&T University mostró la visión del tema, que bien puede ser considerado un problema en Estados Unidos. “Es algo que está en discusión”, manifestó Cy Alexander, quien llevó a su universidad este año a ganar el título de su región Mid-Eastern Athletic Conference. Alexander es miembro del comité de directores de la National Association of Basketball Coaches y próximamente habrá un encuentro “y ese será un tópico que será discutido”. Valoró el punto de que los atletas también reciben una educación.
Alexander vino al país invitado por Score International. Varios jugadores de la universidad lo acompañaron y el pasado lunes impartieron una clínica de baloncesto a niños y niñas en las canchas abiertas del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte. En su opinión personal el problema radica en “el nivel de las universidades”, por entender que hay “de grandes niveles, medianos y pequeños” y cada una tiene “diferentes presupuestos”, por lo que llegar a una uniformidad no será algo tan sencillo. El punto es que se discute el hecho de que mientras entrenadores de fútbol, baloncesto y otros deportes universitarios ganan millones de dólares, los jugadores aspiran a recibir algo también. Por ejemplo, siete años atrás, “coaches” de 42 grandes universidades ganaban al menos un millón de dólares. Para el pasado año percibían al menos 2 millones de dólares.
Clínica
La universidad fue invitada por Score International, institución que utiliza el deporte como plataforma para llevar el “mensaje de Jesucristo”, tal como manifestó su director en el país, David Conrady. “Queremos compartir el mensaje y cambiar a personas de adentro hacia afuera”. En ese sentido, el viceministro de Deportes, Soterio Ramírez, agradeció a North Carolina A&T por venir al país y tener la disposición, a través de Score International, de trabajar con los jóvenes en el Campamento Deportes para vivir tranquilo, entre otros niños. North Carolina perdió de Louisville (que luego fueron los campeones) en segunda ronda en el torneo de la NCAA.
Ha dirigido a jugadores que saltaron a la NBA
En su larga carrera como entrenador, Alexander ha tenido la fortuna de dirigir a jugadores que posteriormente se convirtieron en NBA como Larry Sprigs, que jugó de Los Angeles Lakers; Jackie Robinson, con los Rockets de Houston y Travis Williams, con los Hornets de Charlotte. Dijo que los grandes jugadores que van de la secundaria a la NBA tienen un “don, un talento, que Dios les ha dado y es poco lo que puede hacer un coach”.
